Feel Like Shit •Murata Fuma• #1

19. Joven Murata

—Mira, traje un vestido de encaje con algunos brillos y unos tacones que te van a quedar increíble...

—Estás loca si crees que voy a ocupar un vestido como ese, Kaede.

La azabache frunció levemente su ceño mientras observaba a la mayor a través del espejo, su amiga rodo los ojos mientras regresaba a la cama, tomando asiento sobre esta mientras veía a su hermano y el pequeño Harua jugar con las cartas sobre sofá, eran cerca de las cuatro de la tarde, por lo que Hikari se encontraba arreglandose para su cita, Kaede cuidaría a Harua junto con su hermano, por lo que estaban allí para recogerlo y luego poder regresar con él a su departamento.

Hikari junto la puerta del baño para poder quitarse la bata que llevaba puesta y vestirse rápidamente, colocándose un vestido blanco con calma, acomodando este para ver como se veía con el puesto, recordaba haberlo comprado años atras cuando estuvo embarazada de Harua, pero luego de usarlo durante su embarazo no recordaba haberlo utilizado en alguna para ocasión, lucía igual de nuevo, la parte superior se pegaba perfectamente a su pecho mientras que de su cintura hacia abajo era holgado, llegaba un poco más abajo de sus rodillas lo que le daba más comodidad para utilizarlo, sin embargo aún así opto por colocarse una calza corta de color blanco que solía usar durante sus ensayos en el bar.

—¿Qué te pusiste?

La repentina entrada de Kaede logro sobresaltarla, provocando que llevara una mano hasta su pecho mientras volteaba a verla, la castaña alzo levemente sus cejas mientras sonreía, aunque poco después se acerco a ella y levanto un poco su vestido, tomándola por sorpresa.

—¿Qué haces? —Quiso saber ella tratando de comprender la acción de la mayor.

—Reviso que te hayas depilado —Murmuró la castaña tomando el borde de la calza de la menor, riendo entre quejas cuando esta golpeó su brazo por su comentario—. Por favor, no esta mal dejarse llevar por una vez, no has estado con nadie durante estos cuatro años, de repente apareció ese fuerte y guapo compañero tuyo que te alborota las hormonas...

—No entiendo como es que somos amigas —Chilló ella cubriendo levemente su rostro algo sonrojada por lo molesta que estaba siendo su amiga—. No va a pasar nada, Fuma no es así de impulsivo y aparte, creo que es incluso más tímido que yo como para siquiera pensar en acostarse conmigo...

—Entre beso y beso fácilmente se pueden olvidar de la timidez —Murmuró Kaede sonriendo con diversión mientras llevaba ambas manos a su rostro—. Pero bueno, pase lo que pase, debes estar tranquila porque Harua se quedara conmigo esta noche, así que puedes dormir con él aquí...

La castaña salió rápidamente del baño, cuando Hikari se abalanzó sobre ella con la plancha de cabello entre sus manos, sonriendo con diversión al escuchar la risa de su amiga, luego de que la mayor desapareció de su vista se dispuso a continuar alizando su cabello para que este luciera más ordenado que de constumbre, reviso la hora en su celular y abrió levemente sus ojos para luego terminar de arreglarse, cepillando sus dientes y colocándose un poco de maquillaje.

Rápidamente salió del baño para poder colocarse unas converse negras, se dispuso a tomar un bolso pequeño para poder dejar su celular dentro de este junto a su cartera pequeña, algo nerviosa se dispuso a tomar el cardigan blanco que tenía sobre la cama y por fin fue hacia el sofá, donde se encontraba su pequeño acompañado.

—Hijo—El pequeño volteó a verla de inmediato, bajando del sofá para poder ir junto a ella y poder abrazarla con fuerza—. Tengo que irme, pero si quieres hablar conmigo entonces le dices a Kaede o Jo y ellos me van a llamar de inmediato ¿sí?

—Lo sé, Jo me dijo que jugaremos juegos de mesa y comeremos muchas cosas —Comentó el pequeño con emoción mientras miraba a la mayor.

—Veremos muchas películas también, vamos a pasarla bien sin mamá —Dijo Kaede sonriendo ampliamente mientras se cruzaba de brazos.

—Prometo que mañana ire a buscarte para ir juntos a clases ¿sí?

—Puedo llevarlo yo a clases —Dijo Jo mientras se levantaba del sofá—. Sí vas a nuestro departamento a buscarlo podrías atrasarte para ir a la universidad...

Hikari lo pensó por unos segundos para luego asentía levemente acercándose a los dos hermanos para despedirse de ellos antes de volver a abrazar a su hijo, quien dejo un beso en su mejilla para despedirse de ella; la azabache salió del departamente mientras pasaba una mano por su largo cabello, una vez que el ascensor se abrió en la planta baja, con nerviosismo salió del edificio mientras observaba a su alrededor, deteniendo su mirada cuando Fuma apareció en su campo visual.

Lucía tan varonil apoyado en un automóvil que realmente no pudo contener unna sonrisa cuando este incorporo su cuerpo con nerviosismo al verla aparecer, mientras se acercaba a él fue capaz de notar como una sonrisa tímida se formaba en su rostro.

—Hola —Murmuró ella una vez que estuvieron lo suficientemente cerca—. ¿Esperaste mucho?

—No, ni siquiera me fije en la hora, solo espere a que salieras —Confesó él riendo suavemente mientras miraba a la menor—. Luces muy bonita, es decir, siempre luces bonita con todo lo que usas, solo que siempre utilizas otro tipo de ropa y...

La menor sonrió con diversión mientras se acercaba al castaño, colocando ambas manos en las mejillas de este para luego colocarse de puntillas y dejar un beso caso en sus labios, provocando que Fuma guardara silenció algo avergonzado.

—Lo siento, estoy haciendo el ridículo.

—A mi me parece tierno —Murmuró ella sonriendo ampliamente mientras miraba con atención al mayor—. Entonces joven Murata ¿Cómo sera nuestra cita?

—Bueno, pensé que como ya sé algunas cosas de ti, estoy completamente seguro de que te encanta el arte, busqué en internet para tratar de planear nuestra cita lo mejor posible y encontre una galeria interactiva con montaje de luces —Comentó Fuma mientras observaba a la menor, tratando de buscar algún signo de disgusto o disconformidad antes de continuar—. También pensé que podíamos ir a comer, en realidad podemos hacer lo que quieras...

—Entonces empecemos por la galería de arte —Animó ella mientras colocaba ambas manos detrás de su cuerpo, dirigiendo su mirada hacía el automóvil que había detrás del castaño—. No sabía que tenías auto.

—En realidad es de mi hermana, pero me lo presto para la ocasión —Confesó él sonriéndo algo avergonzado.

Hikari asintió levemente mientras volvía a acercarse al mayor, esta vez siendo recibida de inmediato por los labios del castaño, quien colocó ambas manos en su espalda por un momento hasta que finalmente terminaron su beso, si seguían allí iban a perder lo que quedaba de día y no era la idea, ambos subieron al automóvil, para ponerse en marcha hasta la galería de arte, la cual Fuma se había dedicado a buscar para llevarla.