Los humanos antiguos los mas avanzados de su época tenían la misión de ser el manto de responsabilidad, pero nada se da como se espera, acompaña a nuestra especia en un loco viaje en un lugar lleno de guerra, muerte y destrucción constante.
Esta es...
Un nuevo día llega en el paneta Tau, despues del tremendo desv*r**e, los humanos se levantaban con una fuerte resaca, producto del alcohol de los orcos, pero para uno esto seria un trauma completo.
En una habitación en medio de una gran cama, el primarca Roboute Guilliman se despertaba con un tremendo dolos de cabeza, sus ojos estaban sensibles a la luz, por lo que se tapaba la cara con sus manos evitando la luz de la estrella Tau. El primarca intento levantarse pero sintió un bulto pesado en su pecho por lo que puso su mano para saber que era trato de enfocar sus ojos los cuales se abrieron al ver de quien se trataba.
La mirada de horror se cirnio sobre el primarca al ver a la Eldar Yvraine sobre el, y mas que todo al notar que estaban desnudos los dos, por lo que se golpeo la cabeza con su mano al ver lo que habia echo.
(El inicio de la herejía de Guilliman, a no ese era Horus)
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Primarca: Demonios.
Dijo el primarca mientras se lamentaba por lo que habia echo.
Primarca: Yvraine, despierta.
La mujer que seguía dormida sobre el primarca abrió los ojos mientras trataba de acostumbrarse a la luz poniendo sus manos en el pecho del primarca.
Yvraine: Que paso, Guilliman por que estoy encima tuyo.
Primarca: Y tu que crees, quítate de encima.
La Eldar se levanto notando que estaba desnuda, por lo que se tapo el pecho con sus manos, al quitarse pudo notar que el primarca también estaba desnudo y no solo eso si no que también estaba bien dotado.
El primarca se sentó en la orilla de la cama mientras se agarraba la cabeza al tiempo que la Eldar que se habia tapado con una sabana le pregunto.
Yvraine: Estas bien Guilliman.
Primarca: Si, solo necesito un minuto.
El primarca se levantaría de la cama mientras caminaba hacia la Eldar, la cual miraba al enorme hombre acercarse a ella lo que la puso nerviosa.
Primarca: Escucha bien Yvraine, esto fue un error, esto nunca paso, entendido.
La Eldar la cual estaba asustada por la reacción del primarca, solo pudo decir.
Yvraine: Si.
Tras la confirmación el primarca tomo sus cosas y se cambio saliendo rápidamente del lugar dejando sola a la Eldar.
Esta se sentó en la cama mientras tapaba su rostro con sus manos y empezaba a sollozar, pero cuando alzó el rostro esta comenzó a jadear mientras sentía como sentía que su cuerpo se calentaba al tiempo que se daba placer.
Yvraine: Hay Guilliman por que me haces temblar así, quiero que me hagas grites mas, que me agarres en tus enormes brazos y me hagas gritar. huu.
La Eldar la cual estaba en trance por su estado comenzó a recordar parte de su aventura con el primarca lo que la dejo mas caliente.
