Capítulo 15

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La ventaja de salir del trabajo a las 18.30 es que podía darse el lujo de tener el resto del día para sí mismo, entrenar mientras golpeaba su saco de box o, en ocasiones como esas, apreciar las hermosas tonalidades que el atardecer le daba al cielo

¿Algo que pudiera mejorar esas cosas? Hacerlas en la compañía de alguien que apreciabas

Nala, Katsuki y Eijiro iban caminando tranquilamente sin un rumbo fijo, queriendo apreciar el momento y la compañía. Iban en silencio pues escribir en el block o el teléfono mientras avanzaban no era cómodo y Eijiro no encontraba una posición que fuese cómoda para ambos como para entablar conversación. No fue hasta que llegaron a un parque que decidieron detenerse

Tomaron asiento en el césped frente a una laguna, en una zona más apartada del resto, para mayor comodidad. Nala se acostó y apoyó su cabeza en las piernas de Katsuki, esperando por mimos que, obvio, recibió.

-Y...- comenzó el pelirrojo- ¿qué tal tú día? Apuesto a que me extrañaste- subía y bajaba sus cejas mientras sonreía

Katsuki se quitó sus característicos audífonos, para dar un aire de "comunicación mutua" al resto, antes de hablar- Tsk, ya quisieras tú- Desvió la mirada unos segundos, sin admitir que era cierto- aunque sí esperaba ver algo del entretenimiento gratuito durante la mañana- Lo miró con una sonrisa burlona

A Kirishima se le tornaron rojas sus mejillas- ¡HEY! Eso fue sólo una vez- ambos sabían que no era así, en más de una ocasión, Bakugo pudo apreciar los bailes espontáneos del pelirrojo gracias a las cámaras

Le gustaba ver la alegría y espontaneidad que el chico reflejaba, como si ninguna preocupación lo abordara, disfrutando la vida.... él quería sentirla así

-Como tú digas- le dijo mientras reía y le revolvía el cabello, era demasiado suave- Oi ¿quieres seguir con las preguntas?

Los ojitos de Kirishima brillaron ante esa mención- ¡Sí! Comienza tú

-Tsk, yo di la idea, Shitty Hair, empieza tú

Aunque ya se habían preguntado bastantes cosas, siempre surgía alguna nueva interrogante entre ellos, queriendo indagar más en el otro. Obviamente, había cosas que aún no se decían, pues no había surgido la ocasión o la confianza no estuvo en ese instante

-Mmmhh... en ese caso- comenzó- ¿Me dirás por fin de dónde viene el nombre de Nala?- preguntó mientras acariciaba a la perrita

Katsuki desvió rápidamente su rostro, puesto que sentía cómo se empezaba a sonrojar- ¡Sigues con eso! Ya te dije que era un nombre apropiado para ella, es noble y le da cierto toque de "grandeza"

Llevaba días insistiendo con lo mismo, pues no sentía que la respuesta fuera cierta. Katsuki no le diría que, siendo un niño, le puso el nombre de un personaje de "El Rey León", película que le gustaba y estaba viendo en el momento de darle un nombre a la, en ese entonces, cachorra. Sería un golpe terrible para su orgullo y su creatividad

Kirishima tocó el hombro de Bakugo, para que lo viera hablar- Hum, haré como que te creo- dijo sonriendo- bueno, tu turno

Katsuki lo pensó un poco- ¿qué tipo de historias lees? La otra vez te vi leyendo uno de mis cómics

-Oh, pues leo de todo un poco- dijo mientras rascaba su nuca- aunque últimamente estoy centrado en una historia de aventuras y héroes ¡el protagonista es muy masculino! Me gusta demasiado- mientras contaba, Katsuki podía ver cómo los ojitos de Eijiro brillaban- Te prestaría alguno de mis cómics, pero...­- oh no, el brillo se está desvaneciendo- casi todos se quedaron en mi casa

Gracias, NalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora