Gracias, Nala

Capítulo 21

-Uugghh...- Kirishima bufó cansado, dejando caer su cabeza sobre la isla en la cocina de Bakugo, tenía harina cubriendo su cabello, cuando no debería de estar ahí

-Bro... ¿esas son raí...?

-¡AAAAHHHHH!- el pelirrojo interrumpió a Sero antes de que pudiera terminar esa pregunta- No digas nada, tú no has visto nada- entrecerró los ojos y apuntó al pelinegro en gesto de "quedas advertido"

-Woow, cálmate bro- respondió alzando sus manos, en señal de paz- yo no he dicho nada....

Sacudió su cabeza, tratando de deshacerse de los rastros de harina, antes de organizarse en sus preparaciones

Pero la verdadera pregunta es ¿por qué estaban en la casa de Bakugo?

Pues resulta ser que el rubio estaba rozando el "plazo de entrega" y, la insistencia de Izuku de ayudarlo en su casa para avanzar, le estaba colmando la paciencia por lo que, si el peliverde quería salir ileso y con vida de la propiedad, se armaría con la mejor carta de su arsenal: Kirishima Eijiro.

El pelirrojo se encontraba con Sero Hanta en su casa cuando recibió el mensaje, ellos se habían reunido ya que Kirishima quería celebrar el haber aprobado todos sus exámenes, en especial el de Español que, de no ser por la ayuda del pelinegro, quién sabe cómo le habría ido. Al ver que no era impedimento alguno, fueron juntos a salvar al peliverde

-Volveré a preguntar, aunque dudo que cambies de parecer... ¿necesitas ayuda?- quizás era la 8va vez que preguntaba ¡pero Sero necesitaba hacer algo! quedarse sentado no era lo suyo. Su madre lo había educado para ayudar en la cocina y, si lo viera ahora, lo estaría persiguiendo con la temida "chancla" en la mano

Respiró profundo-... bien, ayúdame con el merengue, allá dejé las cosas- dijo, mientras señalaba el extremo contrario de la isla y él continuaba mezclando

Luego de unos minutos en los que sólo se escuchaba el ruido de los utensilios, Sero habló- y... ¿me vas a decir lo que lleva rondando en tu mente estos días?

Eijiro detuvo su actuar soltando una pequeña risa- ¿sabes? No deja de sorprenderme lo bien que puedes "leerme"- hizo comillas con sus dedos

-Llevas días actuando un poco raro, viejo- el pelinegro siguió con el merengue, mientras reía- no hay que ser un genio o pensarlo de más para saber que algo te pasa- le sonrió, transmitiendo su aura relajada a la conversación

Expulsó el aire que estaba conteniendo- supongo que tienes razón­- se frotó la nuca con su mano, una vez terminó la mezcla para el pastel- bien...dejemos esto para después, voy a poner agua a hervir ¿prefieres té o café?

El pelinegro lo miró extrañado alzando una ceja, pese a preguntárselo apenas llegaron y notó al pelirrojo sacar rápidamente las fuentes, utensilios e ingredientes sin preguntar dónde se guardaban... ¿qué tan seguido pasaba Kirishima en la casa de Bakugo para saber lo que tenía el rubio, y el lugar donde estaban?- eehh...con café estoy bien, gracias

No tuvo que esperar mucho tiempo, para cuando se dio cuenta ya tenía una taza humeante frente a él. Eijiro se acercó con su propia taza en mano, tomando asiento frente a él- Bien... tú sabes que me gusta Bakugo ¿cierto? - esto lo dijo casi en un susurro, por si Midoriya se acercaba, Hanta simplemente asintió y viró sus ojos en señal de obviedad- no estoy seguro de cómo plantear esto, pero en algún punto empezamos a tener cierto grado de ¿complicidad?- contó, moviendo sus manos nerviosamente- pasamos más tiempo juntos aquí en la casa, o en la de Kaminari, tenemos un nivel de confianza diferente al del comienzo !incluso me incluye en asuntos importantes!, hemos tenido...muestras de afecto- al decir esto, las mejillas de Eijiro competían con su cabello, sentía las mariposas flotar en su estómago mientras pensaba en el rubio, los ojos de Sero se abrieron ante lo último y una sonrisa pícara comenzaba a asomarse-..!siento que estamos avanzando! y que, si quisiera dejarle en claro mis sentimientos... no me iría mal, ¿comprendes?