Alma gemela son amigos

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—¿Quieres ser mi amigo? —habia dicho Yuta.
—¿Quieres ser solo amigos? —habia escrito Toge.

Yuta no sabía cómo responder ¿Se merecía a su alma gemela?

La respuesta era, No, aún no. Sabía que si estaban en una relación cuando el aún estaba en proceso de mejoría, algo podría salir mal. Podría volver a hacer daño y no estaba dispuesto a eso.

—Quiero ser solo amigos.

Inumaki abrió unos ojos enormes y estos se llenaron de lagrimas. Su alma gemela lo amaba, pero solo como amigos. Vaya manera de terminar en la frienzone, pensó el albino.

—¡Toge! Déjame explicarte, no llores —dijo preocupado Okkotsu.

Inumaki empezó a llorar hasta que sus mejillas se pusieron rojas, al igual que los ojos.

—No, espera, déjame explicarte, porque, aun no podemos ser pareja —dijo Yuta con voz dulce, tratando de tranquilizar a Toge — Te amo y no solo como amigos, pero no se puede todavía. Vamos no llores.

Inumaki lo miro e infló las mejillas ¿Acaso Yuta era tonto? No podía empezar por allí. ¿Porque siempre escogía las peores palabras? ¿Le gustaba ser malinterpretado?

Inumaki se acercó con poco más y le dio un golpe en el brazo.

—Wow, excelente —se le iluminaron los ojos a Okkotsu. Llenos de administración —Para ser chiquito, eres muy fuerte.

Le llegó otro golpe.

¿Chiquito? Pensó Toge ¿A quien le está diciendo pequeño?

Toge infló aún más las mejillas, levantó sus brazos y se tiro encima de Yuta. Le haría una de sus técnicas de defensa personal, para que viera de lo que era capaz este chiquito.

Lo que no esperaba, era que Yuta tambn fuera versado en artes marciales.

Okkotsu termino por poner encima de él a Toge y lo sentó en sus piernas.

—Jajaja mi futuro esposo es genial, ya no tendré que preocuparme de estar indefenso, ahora tengo quien me defienda —dijo yuta tocando a Toge, nariz con nariz — Hermoso y fuerte, que más podría pedir.

Inumaki se puso como tomate y trato de salir de esa posición tan vergonzosa. Pero Okkotsu lo tenía bien agarrado de la cintura.

—Te amo —dijo Okkotsu — Y es más que solo por ser destinados. Eres una persona que no siente rencor hacia nadie, un travieso, lindo, amable, que no tienes egoísmo en tu corazón. A pesar de las dificultades que seguramente tuviste, has sabido seguir adelante con una sonrisa. Toge me gustaría estar contigo y ser amigos, novios, esposos. Pero no ahora. No me encuentro del todo bien, te conté que aún no termino mis sesiones.

Toge estaba apunto de escribir, cuando Yuta lo detiene.

—Toge, se que quieres estar allí para mí. Lo sé y estoy muy feliz. El problema es que debo superar mi pasado, eso es algo que debo hacer por mí cuenta. Y quiero que me apoyes, pero como amigo, no involucrarte más de lo necesario. Toge, tú tienes que apoyar al Yuta del presente. No el que se quedó en el pasado. Y aún no soy el Yuta que vive el presente.

Inumaki empezó a entender por donde iba. Yuta no quería que Toge fuera su centro de rehabilitación. Aún así, no podía evitar sentirse triste.

—Cuando seamos pareja podremos ayudarnos, protegernos y apoyarnos en todo juntos. Lo prometo. Pero este problema es del pasado. Toge ¿Me esperarías hasta que esté completamente bien?

Toge asintió. Apoyaría a Yuta lo más que pudiera como su amigo.

Por el momento ambos, estuvieron de acuerdo en ser solo amigos.

Yuta iba mejorando, a paso lento pero firme. Estaba decidido a ser lo mejor para su alma gemela.



Continuará.......

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