Capitulo 7
“Cuanto tiempo”
—Entiendo entiendo, ¡Necesitas la ayuda de el gran Jeremías!—Decía este chico desconocido—¿Y porque tus guardias no te dan un arma? Ya no eres una niña.
—¿Estas loco? Si mi tía se entera y se lo cuenta a mi mamá me van a matar... además los guardias tienen prohibido darnos armas bajo ninguna circunstancia.—Decía la pelirroja de este lado de la línea.— Entonc— no termino de hablar cuando Lis la interrumpió para irse que ya no hacían nada ahí.
—Jeremías, ya te llamo más tarde.
—Esta bien he— No termino de hablar cuando la pelirroja cortó la llamada y guardo su teléfono.
—¿Ese era Jeremías? ¿Que hacías llamándolo? —le pregunto Lis dudosa, ya sabía que Jeremías era algo mentiroso.
—Le pedí algunas pistolas.— le dijo Clara super tranquila.
—¿Eh? ¡¿Que le pediste que?!— le gritó Lis. —¿Sabes lo que me hará mi mamá si se entera?
—Ya ya, si lo sé, Jeremías no le dirá nada y tampoco a mi mamá.— dijo la pelirroja.
—Bueno, y ¿Le dijiste sobre Daniel?— pregunto Lis.
—No, solo me pasó por la mente pedir las pistolas a demás si le decía no iba a parar de hacer preguntas, más de las que me hizo solo por pedirle las pistolas.— reprochó clara.
—¿Y cuando las va a traer? — Pregunto Lis.
—!Ay! Se me olvidó preguntarle.— dijo Clara sacando el teléfono.
—¿Lo vas a llamar?— pregunto Lis.
—No no, le dije que lo llamaría más tarde, sólo veía la hora.— decía Clara mirando la hora — ya va a ser el medio día, y ¿si vamos a ver a Leo? No creo que sea lo mejor dejarlo solo en este momento.
—¿Estas loca? ¿No lo viste? no estaba bien… necesita ayuda profesional. Quizás lo veamos otro día.— dijo Lis.
—¿Otro día? No, vamos ya.—Decía Clara agarrandola del brazo, caminaron hasta la esquina del cementerio y abordaron un autobús que las llevo a una calle antes del centro de atención para enfermos mentales y no porque Leo sea un enfermó mental si no porque fue la primera opción al verlo tan alterado y aferrado al cadáver de su padre.
—Ven, Lis, está al frente.— le decía Clara mientras esperaban que el semáforo diera rojo para poder cruzar.
—Ok— decía cuando de pronto dio rojo — ya, crucemos rápido, Clara.
Llegaron y entraron, caminaron hasta donde viene a una enfermera para preguntarte donde tenían a Leo (Creó que está es la primera vez que vienen a un centro de atención para enfermos mentales) la enfermera las mira y les dice que pregunten en el centro de atención al cliente.
—Oh, gracias y ¿Dónde está eso?.— Pregunto Clara.
La enfermera señaló hacía la salida y dijo:
—Pregunten a ella sobre su leo.— mientas señalaba a una señora que escribía algo en unos papeles que estaban encima de un escritorio.
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Otro psicópata del montón
Teen FictionBienvenidos a silent city, una ciudad muy activa hasta una hora específica de la noche, dicen que a partir de esa hora ocurren asesinatos. muchas personas pierden la vida y aparecen mutiladas por ignorar las advertencias. muchos dicen que una...