Otro psicópata del montón

Capitulo 13

Capitulo 13

“Daniel y Lis”

   —¡Santiago! ¡Corre!— grita Joseph al dispararle a Daniel y recojer a Clara en sus brazos y correr.

   Santiago corre pero Reinel le dispara cuando levantó a Lis para llevársela.

   —Mierda.—Dice Joseph y le dispara a Reinel pero no le da ni uno por la incomodidad de cargar con alguen.

   —¡Ay! Que verga — se quejaba Daniel.— esto duele como el infierno.— decía mientras le disparaba a Santiago también pero Santiago huyó y dejó a Lis allí sola. Los tres se escaparon de igual manera no eran de mucha importancia ninguno solo Lis y para Daniel Lis y Clara.

   —No puede ser ahora que hacemos.—dejamos a Lis allá con esos locos.— decía Joseph corriendo hasta que observo que Santiago no lo escuchaba, había caído al suelo de asfalto sin fuerzas.

   —No te detengas debemos encontrar donde escondernos para curarte.— le dijo Joseph.

   —La deje sola.— dijo Santiago mirando a la nada.— pude sacarla de allí pero la abandoné y ahora va a morir.— siguió diciendo.

   —No, no. Deja de culparte, no es tu culpa, Santiago si no salías de allí estarías muerto ahora.—le decía Joseph.

   —De igual manera tenía que salvarla... mírame estoy herido pronto moriré desangrado.

   —No te vas a morir ¡Coño!— gritaba Joseph llorando.— aguanta un poco más.

  Intentó cargar con Clara y Santiago pero era mucho y cayó a la carretera rascándose la cara y los brazos.
   —¿que hago? ¿Que hago? Mierda, no te duermas Santiago.— estaba perdiendo la postura estaba entrando en un estado de negación que no podia entender, no sabía lo que estaba sucediendo ni porque sus lágrimas brotaban de sus ojos.— No te mueres, por favor.

   —¡Hey! Tu chico, no te muevas y separate de esos cadáveres, hijo.—me dijo el jefe llegando a la escena con sus 4 sobrevivientes.

   —No, ¡No! ¡Ellos no estan muertos!— gritaba Joseph desesperado —¡Por favor ayúdelos.

   —Señor, la señorita solo está cedada y el hombre está muy mal herido tienen múltiples heridas de balas en el cuerpo si no se trata pronto morirá.

   —¿Como ese hombre acabo así?— pregunto el jefe.

   —Intento salvar a algún de un loco asesinó.— decía mientras miraba al jefe de la división con una mirada fría y muerta.—¿Los... ayudará?

   —¡Wear! ¡Builder! Pueden llevarlos al hospital más cercano y tú chico ve con ellos, no te ves bien.

   —Si, si. Por favor necesito ir.—Dijo rápido ayudando a levantarlos.

   —¿Donde estar el loco ese?—Preguntó el jefe.

   Ràpidamente Joseph señaló de donde venían y el jefe miro la sangre y dijo a la ligera: —Solo sigamos la sangre.

   Clara, Santiago y Joseph luego de esa conversación fueron llevados al centro de atención y emergencias.

   —¿Ahora lo entendiste? Amigo mío.— le dice Reinel a Daniel.—Es mejor que te mueras ya ¿no crees?