Capitulo 27

10K 459 102
                                    

Dejen aquí su: "¡Llegué!"

♠♣♠

Kattia

Eso de enfrentar los sentimientos no es mi cosa favorita del mundo por hacer. Nada sorprendente.

Así que ahora estoy sirviendo dos vasos de limonadas y unas papas fritas en un plato hondo luego de huir de mi cuarto y dejar a Ender allí con una tonta y nada creíble excusa. Alguien debería darle un premio con todo lo que soporta al ser mi novio.

La verdad, yo ya me hubiera abandonado en este punto y apenas se va a cumplir un mes de nuestra relación dentro de unos días.

–¿Qué haces aquí, pequeña?

Me sobresalto al escuchar la voz de Joana. Dejo la bolsa de bocaditos y doy media vuelta, poniendo una mano en mi pecho por el susto.

–Joana, por Dios, me has dado el susto de mi vida– se ríe por lo bajo, rodeando la encimera y tomando lo que había servido para ponerlo encima de una bandeja. La observo en silencio antes de responder–: Esquivando una charla llena de sentimientos de los que no quiero hablar.

–Igualita que tu padre– niega con la cabeza– Ve y habla con el chico, yo me encargo de llevar la comida.

Hago una mueca.

–La verdad, preferiría seguir aquí un rato más.

–No, eso no va a suceder– me empuja con delicadeza afuera de la cocina, mientras yo intento resistirme fallidamente.

–Por favor, no quiero.

–Deja de huir– me reprende– Al fin has encontrado en dónde encajas, ¿eso no es lo que buscabas con tanto ahínco cuando llegaste aquí?– asiento– Pues ya lo tienes, así que disfrútalo.

Suspiro, bajando la cabeza.

–¿Sabes qué día es hoy?– pregunto con la voz temblorosa.

–Sí, pequeña, lo sé.

–¿Y sabes qué pasó ayer?

Por mucho que quisiera negarlo, estoy segura que hice todo un espectáculo con Ender y su hermano al llegar a casa. Por muy tarde que haya sido, James y Joana deben haber visto mi deplorable estado.

–Yo abrí la puerta– confiesa con una sonrisa maternal que está a nada de cristalizar mis ojos– Conseguí que tu padre no se enterara, pero tendrás que ser más cuidadosa a la hora de beber, ¿bien?

–Sí, solo fue una vez. Nunca había hecho nada así.

–Te creo, Kattia– regresa al repostero donde había dejado las cosas preparadas– Ahora ve con ese chico, no creo que sea tan paciente. Llevas como diez minutos aquí.

Me río, recuperando un poco el humor.

–Te sorprendería lo paciente que es. Pero sí, ya me voy– antes de terminar de salir de la cocina, regreso y agrego–: Gracias, de verdad.

Pero me voy sin querer escuchar su respuesta. Estoy demasiado sensible como para escuchar una cálida réplica que solo va a recordarme a como mamá me hablaba y actuaba cada que le agradecia que estuviera para mí.

Siempre decía con algo como: Después de nueve meses cargándote, ya te tocaba agradecerme, pero siempre agregaba con más amor maternal: Eres mi hija, no tienes por qué agradecer, haría todo con tal de verte feliz.

Camino por el pasillo hacia mi cuarto con lentitud, me quedo parada frente a la puerta entreabierta y después de tomar algunas respiraciones profundas, entro.

Ender inicia con "E" | 7a.m #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora