Sobrevivir no es lo mismo que vivir

El reino

El reino

Decidimos dirigirnos allí y nos encontramos con dos hombres a caballo que actuaban como caballeros.

¿Qué mierda era esto? Nos hablaron de un Rey Ezequiel, nos hicieron dejar las armas, que en verdad eran dos: la de mi suegro y la de mi novio.

Entramos a la comunidad denominada "El Reino".

Esto era un poco raro, una comunidad llamada: "El reino" que su líder se hace llamar rey, sus guardias actuaban como si estuvieran en la edad media. Jesús los conocía y gracias a eso teníamos algo de ventaja.

La comunidad era bastante grande, habían muchas personas dentro, tenían algunas casas y cultivos.

Y sorpresa, nos encontramos con alguien conocido: Morgan.

Ya ni me acordaba que ese hombre existía, había desaparecido. Supongo que todos lo dimos por muerto.

Nos condujeron a una especie de sala de teatro con un escenario, allí estaba el supuesto rey y mierda si que daba miedo, ya que tenia un puto tigre como mascota. El gran animal rugió y yo me asusté, no fui el único porque Carl enseguida tomó mi mano.

Jesús iba a presentar a nuestro grupo pero al ver las caras de todos agregó— Cierto, olvidé mencionarlo, él tiene...

—Si, un tigre— dijo mi suegro.

—Él es Rick Grimes, el líder de Alexandria— prosiguió Jesús dirigiéndose al rey— Y ellos son parte de su gente.

Resumiré la charla: le propusimos al Rey que se unieran a la guerra contra los Salvadores pero no tomaron una decisión, Ezequiel nos propuso quedarnos en el Reino mientras reflexionaba sobre nuestra propuesta.

Salimos de ese lugar y junto a Carl recorrimos el Reino.

—Es bastante grande— dije y sonreí— Esta gente parece fuerte.

—Tienes razón, son muchos y tienen armas. Espero que acepten— suspiró Carl y delineó el contorno de mi mano con su dedo.

***

Nos alojaron en una casa, dormimos en el suelo con unas sabanas; en medio de la noche Carl me abrazó y dormimos de esa manera hasta que amaneció.

Al otro día el Rey nos avisó que ya había tomado su decisión: No iban a aceptar porque seria peligroso y perderían a mucha gente. Lo que si nos ofrecieron fue alojo para Daryl, quien se quedo por decisión de Rick.

Nos fuimos inmediatamente del Reino, salí con una sensación de frustración y enojo, que se esfumó cuando mi chico tomó mi mano. Volvimos en un auto hacia Alexandria, pero en medio del camino nos encontramos con unos autos tapando el camino.

—Alguien bloqueo el camino— apuntó Jesús— Deben ser los Salvadores.

—Miren— indicó Carl— creo que esa es su base— todos nos acercamos a la ventana y en efecto parecía una base.

—Tenemos que seguir— dijo mi suegro— Los movemos y volvemos a ubicar. Ni siquiera sabrán que estuvimos aquí.

Al bajar de los autos notamos una especie de trampa en el camino

—¿Qué es esto?— cuestionó Michonne.

—Esperen— dijo Carl— Cuando me escondí en el camión, oí a algunos hablando de esto, es para las hordas.

Esta mierda tenía explosivos. La normalidad del apocalipsis.

Decidimos intentar desactivarlo y llevarlos con mucho cuidado, Rosita nos indicó que debíamos hacer cada uno pero con peligro de explosión.