Prólogo

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Ellos, como todo el mundo, creían que tenían una existencia completa para amarse.

Si hoy discutían y terminaban, mañana podrían reconciliarse y besarse con la misma pasión de siempre, con dolor y amor, porque eso era lo que los definía. Podían vivir sin muchas cosas, menos sin el amor del otro.

Aunque parezca trivial, eso lo era todo para ellos.

Tocarse las manos, besarse con delicadeza o mirarse mientras los rayos del sol hacían brillar sus mejillas. No importaba si era de día o de noche, ese brillo siempre estaba en el otro, algo que nadie más veía o apreciaba, pero que ellos parecían enredarse en esos detalles.

El tiempo podía pasar muy rápido, pero esos momentos en los que sus vidas parecían tener un rumbo se sentían eternos. No importaba si peleaban o reían, esos momentos que hacen a una pareja real y eterna siempre estuvieron con ellos.

La vida no era un melodrama romántico, porque ambos se lastimaron demasiado, pero siempre volvían porque eso era el amor joven. Siempre habría errores; tenían que ser fuertes.

Pero esa noche...

Después de diez años de una relación de idas y venidas, algo pasó con ellos. El amor silencioso seguía con ellos, siempre lo estaría, pero algo había cambiado.

Tomados de la mano, mirándose sin decir una palabra.

—¡¡¡Hay mucha sangre!!!

—Tiene que tranquilizarse —suplicó la operadora de emergencia—. Por favor, necesito que me describa lo que está pasando.

La mujer, con el móvil pegado al oído mientras lágrimas caían de su rostro, no sabía qué hacer. No quería mirar la escena, tampoco escapar de la cabaña por miedo a encontrarse con los perpetradores de lo ocurrido. Tenía miedo, como nunca antes lo había tenido.

Ella era una mujer frágil, no podría pasar por todo lo que esos chicos habían pasado. Porque los chicos que se miraban en silencio, quizás sin vida, eran fuertes y no habían podido soportar todo lo que había pasado.

—La ayuda está en camino —informó la operadora con voz sosegada—. Necesita buscar un lugar seguro.

La mujer no sabía qué hacer. Solo se tiró al piso y apretó el móvil contra su oído mientras se encogía lo más que podía. Aún podía ver esas manos, apretándose fuertemente. Esas miradas pálidas, llenas de sentimientos perdidos en esa sangre que los cubría.

—Hay mucha sangre —reiteró la mujer, su voz parecía ya no tener vida—. Hay mucha sangre. Mucha... sangre.

—¿Cómo se llama? —preguntó la operadora para distraerla.

—Sara... —respondió con la voz estrangulada. Su cuerpo no dejaba de temblar mientras hablaba.

—Muy bien, Sara. Tiene que escucharme, ¿de acuerdo? La ayuda ya está en camino, no le pasará nada. Es de día...

—Lo vi.

—¿Qué vio?

—Los cuerpos. Son dos hombres jóvenes. Creo... Creo que están muertos.















Fecha de inicio: 13-mayo-2024

Este libro tendrá romance, terror y mucho dolor de amor. Es un libro que quiero experimentar, por el momento tengo en mente algo corto, ya que a mí me gusta escribir libros largos. Pero quiero hacer algo diferente aquí, dejando todo más corto y con escenas del amor más real que puede existir.

Mi plan es que la relación de los protagonistas (en pasado y presente) sea lo más real posible. Teniendo crisis y dolor.

No estoy seguro de poner una advertencia de contenido a esta historia, solo que será de romance en tiempo pasado y en el presente será de una pareja acosada por unos asesinos.

Además, esta nueva historia me ayudará a retomar la escritura rápida, porque lo que pasó con Wattpad me dejó bastante mal. Solo eso. Gracias por leer.

Recuerden comentar y votar que eso me ayuda mucho.

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