AMO JUGAR CONTIGO

"Dos caras de la misma Moneda"

Sus ojos lo miraban incrédulo... ¿Por qué es tan difícil? ¿Por qué no puedo odiarte?  Eres despreciable, has caído tan bajo, y aún así Yo... ¿Porqué me he enamorado de ti?

Me odio a mi mismo, no puedo juzgarte, ya qué también Yo he caído tan bajo.

....

Recordando el pasado, no eran simples sentimientos pasajeros. Era algo que no podía explicar. Era su destino o tal vez, su ruina. Sea como sea, no podía soltarlo, no podía dejarlo ir.

Aunque ardiera en una caldera consumiéndose a si mismo, nadie podría entender los sentimientos que tuvo que ocultar por tanto tiempo.

Fue una mirada, un dolor en el pecho, y una alma deseosa de él. Era más que amor, era obsesión y deseo carnal. Quería amarlo de la mejor forma, pero también consumirlo si decidía irse.

Evan... Te amo... Solo puedes ser tu, eres mi único sueño. Eres mi deseo, mi amor, mi vida, mi meta... Si no eres tú, prefiero morir.

La mañana pintaba hermosa. Esas finas sábanas cayeron al suelo, dejando a la vista una hermosa figura blanca como el mármol, tan brillante e inigualable.

- ¿Ya es de día?

Demian estiró sus finos dedos, tratando de buscar su celular. Solo para darse cuenta que estaba tirando en el suelo.
Se quedó unos segundos viéndolo reflejándose en la oscura pantalla.

Dos siluetas en la oscuridad. Él solo podía escuchar sus voces, sus gemidos de placer, y la voz de aquella persona que tanto amaba.

Dolia, dolía tanto y tan profundo que no quería levantarse de esa cama. Las voces no era posible sacarlas de su cabeza. Había regresado por unas pocas razones y una de ellas, era Él...

*Sonido de llamada*

Demian alejó sus pensamientos, para posteriormente contestar el teléfono sin interés.

- ¿Que sucede?... ¿Que?... Iré de inmediato.

Fue una llamada corta, pero las palabras que escuchó de la otra persona lo dejaron estupefacto.

Galled quiere cancelar el compromiso con Liie Azark...

Demian apretó los dientes, pensando en la noche anterior. No era posible, su hermano no podía estar enamorado de Evan o si? El hombre que Demian conocía, era imposible que se enamorara. No podía enamorarse o si? No! Imposible!

Demian se apresuró a tomar su ropa, atarse el cabello, colocándose sus lentes, al mismo tiempo que contactaba a sus amigos para avisar que llegaría tarde.

...

Estaba por irse a trabajar, cuando alguien llamó a su puerta.
No podía creerlo, pensando que estaba alucinando ¿Que hacía un fantasma del pasado en la puerta de su departamento?

Dejó caer su mochila completamente incrédulo de lo que veía.

- Evan...

Sus manos se tensaron, sintiéndose como si fuera a llorar.

- ¿Que haces aquí?... Liie.