XVII

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—¡Beomgyu! ¡Solo ayudame! — Soobin gritó con desesperación, mientras Beomgyu solo rodaba sus ojos. —Bien...— Dijo en un tono aburrido.

Soobin dando vueltas por todo el salón, hoy mismo seria el dia, en donde Soobin le preguntaría a Hueningkai sobre afirmar lo suyo. Ser pareja.

Beomgyu no era gran ayuda...Pero el solo dice que es su venganza por humillarle el día que él se confesó. Da igual que tres años hayan pasado, él quería seguir vengándose.

—A ver...¿Que le gusta a Hueningkai? — Gyu preguntó mientras se cruzaba de brazos.

—Bueno...— Dejo de dar vueltas para pensar. —Los girasoles...—De repente, sonrió viendo al suelo. —Taylor swift.. — Siguió pensando. —¡Oh! ¡El pastel de fresa, y helado de chocomenta! —Miro a Beomgyu con una sonrisa, mientras el contrario solo le miraba seriamente, muy en el fondo estaba muy feliz de su amigo. —Bueno...junta todo eso en un estilo de declaración...un regalo o algo por el estilo. ¿O te gustaría hacer algo más creativo? — El Choi mas menor de ellos dos, alzó una ceja para que Soobin soltara una pequeña sonrisa. —Algo más creativo...— Dejó salir un pequeño suspiro. —Huening no merece algo simple. Él merece algo grande, algo genial, cómo el. — Un color carmesí se adueñó de sus mejillas.

— ¡Ah! ¿Por qué te sonrojas, eh? — Empezó a reírse de él de una manera burlona, mientras Soo, solo podía bajar su mirada, avergonzado. — ¡A-Ayúdame y calla! –

—Bien..Bien.. —

...~...

Varias horas pasaron, y Soobin sudaba de los nervios.

Taehyun, Beomgyu y Yeonjun fueron los encargados de traer a HueningKai hacia aquel parque en el cual ambos establecieron su amistad.

Ese mismo completo de girasoles y de flores distintas, ese ambiente tranquilo que se adueñaba del lugar. Esa sensación de calma que le recorría de pies a cabeza con tan solo pisar el sitio. Suspiro impaciente, quería que él llegara ya. Quería llamarle cómo su novio de una vez por todas.

Pocos minutos pasaron, y la voz de Huening ya se hizo presente. — S-soobinnie, ¿estas aca? — habló, el parque ya solo era alumbrado con la luces de los focos, así que Choi se escondía en la pura oscuridad.

Avanzó pocos pasos, quedándose justo debajo de aquellos postes que iluminaban. —¡Sobinnie! — El menor solo saltó a los brazos del contrario, y el mayor lo aceptó, sonrió, dejando ver sus lindos hoyuelos. Esos tan lindos que hacen que Kai se derritiera en amor.

Cuando el rubio observó su alrededor, los tres que le atrajeron a ese parque. Habían desaparecido completamente. —Sobinnie ¿No has visto a los demás por aquí? —Volvió su mirada a su mayor. —¿Los demás? – fingió no saber a quienes se refería, mientras sentía los nervios inundar su estómago. — Ya sabes. Yeonjun, Beomgyu y Taehyun. — Dijo con un tono tranquilo, manteniendo el contacto visual.
—¡Ah! Ellos...— Suspiro— No importa ahora mismo. —  Saco su mano y se la entregó. —Demos una vuelta ¿Te parece? — Huening solo respondió con una sonrisa dulce, acepto su mano.

Caminaron durante un buen rato, hasta que llegaron a un sitio exacto, justo donde los girasoles estaban. Y al lado, un estilo de picnic, mientras Taylor se reproducía a tono tranquilo
— U-Uh...¿Que es todo esto, Sobinnie? — Pregunto, con una voz ligeramente confusa. —No me cuestiones mucho, solo siéntate. Quiero hablar contigo. — Finalizó, con un tono algo más serio de lo habitual.

Hyuka asintió suavemente, y se sentó en aquel mantel que estaba estirado en el suelo, mientras que el mayor imitaba su acción.

Kai vio cómo unos tarros de chocomenta descansaban en una pequeña nevera, sus ojos brillaron con emoción en ellos y rápidamente agarro uno. —¿Quieres? —Le ofreció amablemente, para que el contrario sólo negara.

Soobin detestaba el chocomenta, solo había "malgastado" su dinero por Huening, no por nada más.

Observar a Kai con la boca llena de helado, se le llegaba a hacer una imagen tierna y linda.

De pronto, hablo. —¿Puedo confesar algo? —Dijo un tanto nervioso, su voz hasta temblaba. —Claro, te escucho. —Respondió mientras iba añadiendo más helado a su boca.

Justo para ese momento, Soobin sentía sus mejillas tornase en rojo vivo al tener miedo de la respuesta del contrario.

—¿Debería de ser sincero? —Hablo con un tono bajo, tomó un suspiro más. —Huening ¿Podría llamarte mi novio? —Choi pudo escuchar claramente como el menor tartamudeaba palabras incomprensibles.

Antes de que Hueningkai hablara, el se adelantó. Momento perfecto para hacerlo.

—Se que he sido un completo idiota por haberme ido con esa...-Miro hacia abajo dejando salir un poco de aire por su boca. —Eun..—Hablo en un tono arrepentido.

—Da igual ahora mismo. —Sacudió la cabeza con rapidez y volvió su mirada al rubio.—Quiero pasar mis días contigo. Mis días, tardes, noches...solo quiero estar contigo, Huening. —

—Amaría que me dieras el placer de ser tu novio y ser tu acompañante de vida. —Sus ojos seguían clavados en el menor que solo estaba de cabeza baja con sus mejillas claramente rosas.

—Rubio...se que estar roto, y demasiado..—Agarro el mentón del mencionado para mantener contacto visual. —Permite ayudarte a sanar ¿Si? —

—Permíteme darles besitos a todas tus heridas, tanto interiores como exteriores. Permíteme besarte para felicitarte sobre tus logros y metas. —Lentamente, acercaba su rostros junto al de Hyuka.

—¿Me lo permitirías, Hueningkai? —Miro con esperanza al menor, mientras este seguía con su boca ligeramente abierta debido a la impresión, mientras sus ojos, llorosos por la felicidad de aquel momento.

Lo único que Kai pudo hacer, fue hacer que sus labios conocieran los de Soobin de vuelta, un beso cálido de varios segundos.

Cuando por fin se separaron, Hueningkai clavo sus ojos en los del contrario y asintió confiado. —Claro que te lo permitiré, Sobinnie. —

Con los ojos clavados en los del contrario, varios segundos que parecieron ser horas lentísimas, sus cuerpos se juntaron en un abrazo cálido y seguro. —G-Gracias...de verdad... --- Dijo Choi, su voz sonaba algo débil, lo que indicaba que estaba sollozando.

Hyuka volvió a juntar sus labios, en un acto no tan desesperado. Mientras que con sus manos, acariciaba sus mejillas, limpiando sus lágrimas con un toque suave.

—Entonces...mi querido novio...—Sonrió tiernamente mientras seguía analizando los oscuros ojos del rubio. —Déjame sanarte ¿Bien? —No espero, ni obtuvo respuesta. Un beso más largo y más profundo que los demás se había presentado entre ellos dos.

—Tus labios saben a chocomenta, Kai. — Tomo aire — Es asqueroso. —Finalizó.

Por esto, se ganó un golpe de su ahora novio.


"I don't wanna touch you, I don't wanna be
Just another ex-love, you don't wanna see
I don't wanna miss you (I don't wanna miss you)
Like the other girls do
I don't wanna hurt you, I just wanna be
Drinking on a beach with you all over me
I know what they all say
But I ain't tryna play"

20:20 - SOOKAIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora