"Rey de los asesinos" así era llamado un apodo que su compañero le solía llamar, un demonio que no dudaba en matar a todo a aquel que su organización se lo pedía, eran considerados como el perfecto dúo, jamás fallaban en sus misiones y nunca expresa...
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- ¡Buenos días, Chuuya!
Saludo con una gran sonrisa característica Albastross que bajaba de su carro para ir corriendo hacia el pelirrojo, este se detuvo y miro con una sonrisa al rubio
Apenas había llegado y mucho de los estudiantes comenzaron a murmurar viendo como el uniforme del pelirrojo estaba adornado con una estrella de honor
- ¿Eh? ¡Conseguiste una estrella, felicidades, chuuya!
Felicito con grata felicidad el rubio abrazando por los hombros al pelirrojo que reía ante los comentarios de su amigo
Cuando llegaron a su salón los murmuró no acababan, al contrario, empeoraban llamando la atención del castaño
- Que exagerado de su parte, llegar con una estrella estoy segura de que se lo dieron por pena
- ¡Ja! De seguro se siente mejor por tener una estrella, ¿tú que opinas, Dazai?
- ¿Creen que el colegio daría una estrella así de fácil a una babosa?
- ¿¡Que dijiste?!
- Chuuya cálmate
- Si creen eso entonces porque no van y se quejan con el profesor Natsume, si les molesta tanto pueden tomar esa decisión o irse del colegio
- ¿Me está defendiendo o me está insultando?
- Es Dazai, Chuuya él jamás defiende a alguien
- Lo detesto
- ¡Yo también lo hago, babosa!
- ¡Tonto, te oí!
- ¡Ese era el punto, enano!
- ¿¡A quién llamas enano?! ¡momia andante!
Todos los estudiantes miraban un poco sorprendidos como ambos compañeros se peleaban
Albastross intentaba tranquilizar a chuuya mientras que Atsushi y Akutagawa intentaban calmar a Dazai
Que por alguna razón no funcionaba mucho, no fue hasta que llegó el maestro que ambos menores dejaron de pelear mirándose mal en más de una clase hasta el comienzo del descanso
Fue el único momento en la cual ambos menores dejaron de verse mal, Chuuya y Albastross se sentaron a una de las mesas un poco alejadas
No tenían ánimos de oír a los envidiosos de la sala de descanso, ambos amigos se mantuvieron en silencio, pero no fue hasta que el rubio habló
- ¿Has pensado que pedir?
- ¿Qué pedir? ¿A qué te refieres?
- Cuando tienes mejores notas o consigues una estrella el colegio te concede un “deseo” puedes pedir lo que desees, una vez pedí una bicicleta nueva
