BAD GIRL, GOOD LIPS. (Editando)

Capítulo 37.

Este capítulo sera muy cortito, no se si vieron pero prometí que si mi selección Colombia bella ganaba, les subía un cap, y aquí está. ¡Viva mi selección!

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Ayer en la noche le confesé a mi mejor amigo que estaba enamorada de el. Hoy el viene, hablamos, y parece que las cosas están bien.

No mucho para mi.

Me alegra que las cosas no se vayan a poner raras, aunque ahora no debería preocuparme tanto. Pero, lo hago.

No porque no será raro, es porque luego de eso mi mejor amigo me dio una no muy buena noticia. Se ira a estudiar a una universidad.

En otra ciudad.

Lejos de aquí.

Eso rompe más mi corazón que su rechazo, porque es obvio que el no siente nada por mi.

No quiero que se vaya, no lo quiero lejos.

En parte, pensándolo muy bien, tal vez sería bueno, mantenernos alejados seria una oportunidad para olvidarlo.

Me remuevo otra vez en mi cama, no puedo dormir.

No se que haré con el lejos de mi. Existe la posibilidad de que yo vaya a la universidad a la que el va, eso solo pasaría si me gano una beca, porque mi madre no tiene dinero suficiente para pagarmela.

No se cuanto tiempo estuve en mis pensamientos, pero de repente me dormi.

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Siento a alguien moverme.

-Missy.

Suelto un quejido.

-Missy, debes ir a la escuela.

Vuelvo a soltar otro quejido, pero esta vez abro los ojos. Me levanto pesadamente de la cama, quedando sentada.

-Iré a preparar el desayuno. -me dice mi madre, dandome un sonoro beso en la mejilla.

Le doy una sonrisa. Ella sale de el cuarto, dejándome sola.

Me coloco las pantuflas, intento levantarme de la cama, pero las sabanas se enredan en mis piernas, haciéndome caer.

Genial.

Libero mis piernas de las sabanas, y me levanto.

Cuando salgo de el baño, me siento un poco más relajada.

Escucho a mi celular sonar, así que lo tomo para revisar. Es un mensaje de Scott.

¿Puedo ir a buscarla, señora reina?

Suelto una risa. Se que está tratando que todo esto sea normal.

Por favor, Missy, inténtalo.

Doy un suspiro antes de contestar.

Por favor, señor rey.

Dejo el teléfono en la pequeña mesa, y me dispongo a colocarme algo de ropa.

Hoy no estoy de muchos ánimos, así que me colocó lo primero que veo.

Mi cabello acompaña mi humor, por lo que hoy no se ve muy bien, se ve terrible, así que me coloco una gorra.

Bajo corriendo las escaleras, aun es temprano, por lo que puedo desayunar con calma.

Mi mamá coloca el desayuno enfrente mio. Y enseguida empiezo a comer.