Slave of Freedom [TMNT]

Lo que soy

El día se abrió paso con el reloj interno de Miguel Ángel, se estiró soltando un bostezo, el peso en su pecho ya empezaba a tomarlo como algo normal.

Bajó la mirada, encontrándose a una Zareen acurrucada, estaba en posición de ovillo con la mejilla recargada en su plastón.

Había entendido que a la chica le gustaba sentirlo cerca mientras dormía, buscando su calor y protección.

Se veía tan pacífica que le fue imposible no sonreír ante esa imagen.

Revisó su celular, ya pasaba de las once de la mañana.

Por mucho que quisiera dejarla dormir más, debía alimentarse y seguramente sus hermanos ya estaban levantados.

Acarició el cabello pelirrojo de la chica, quien se acurrucó más, escondiendo la cara entre sus manos.

-Zareen...- murmuró en su oído -Ya es hora de levantarse.

-Mmm...- respondió con un leve quejido para finalmente abrir los ojos perezozamente.

-Buenos días- canturreó al verla frotarse los ojos.

-Hola Mikey- bostezó.

-Lo siento, te hubiera dejado dormir más pero necesitamos comer.

Ella asintió, levantándose con un estiramiento.

El mutante sonrió, los círculos oscuros bajo los ojos dorados de la joven se estaban aclarando.

-Venga, vamos- se levantó también caminando a la cocina, encontrándose a los tres hermanos y a la rata sentados, cuando todos posaron sus miradas sobre ellos, Mikey se agachó para murmurar -Algo me dice que te van a interrogar...

Ella asintió, soltando un pesado suspiro.

-Buenos días- saludó Leonardo con su voz más ronca de lo normal, señal de que no llevaba mucho despierto.

-Buenos días- respondió sentándose en la mesa junto a la rata y el lugar que le correspondía a Miguel Ángel.

-Zareen... queremos hablar contigo- intentó explicar el líder, siendo interrumpido por la chica.

-Lo sé... les debo una explicación- habló con la cabeza baja.

Aunque no les gustara, si algo le habían enseñado era a guardar respeto a sus amos y eso haría.

Los hermanos se miraron entre sí.

Mikey se encogió de hombros, centrándose en hacer el desayuno.

-¿Por qué no nos habías dicho que eras una mutante?- comenzó Raphael.

-No creí que fuera necesario, dragoste- explicó jugando con sus manos -Antes nunca me había servido serlo...

-¿Cómo es que...?- Donnie hizo una pausa, buscando las palabras correctas para hacer la pregunta -Bueno... ¿Pasó?

-No tengo muchos recuerdos de eso...- a pesar de que sí lo recordaba, no se sentía lista para decirlo, aún era extraño si quiera sentirlo, tener que vivir con esos cambios... no podía acostumbrarse, menos dar una explicación detallada de todo lo que le hicieron.

La respuesta pareció inquietar al mutante de bandana morada pero este sólo asintió.

-¿Fue cuando eras muy pequeña?- recibió un asentimiento de cabeza por parte de la joven -Ya veo...

-¿Cómo es que puedes verte...?- Leo la señaló desde la cabeza hasta los pies -¿Normal?

-Temo que no tengo una respuesta concreta... con la excepción de que mi dueño siempre mostró repulsión por mi transformación- ella no lo notó pero esa respuesta hizo que el temperamental apretara los puños hasta que sus nudillos se hicieron blancos y que Mikey se tensara, apretando la cuchara de madera en su mano, provocando un leve crujido -Por eso siempre estoy así- se miró las manos.