Narra Elena
He pasado las mejores vacaciones de mi vida junto al amor de mi vida. Claro, no faltaban las perras en bikini con cuerpo operado que le coquetearan al imbécil de mi novio. Tendré que ponerle un cartel en la cabeza que diga: ¡ES MIO PERRAS!
Volviendo a lo increíbles de mis vacaciones, hemos tenido que retornar a Mistic Falls ya que el pequeño Scott estaba por nacer en estos días. Damon a regañadientes se subió al avión, ahora estaba a mi costado dándome pequeños besos en el cuello.
-Para, acá no Damon.- rio por las cosquillas que me hace.- Sabes que ese es mi punto débil.- le sigo el juego.
-Me encanta ponerte así, me muere de ganas de hacerte el amor aquí en el asiento. Solo que el viejito del costado nos esta mirando.- volteo y me pongo como un tomate cuando veo al señor mirándonos con mala cara.
-¿Recién avisas pendejo de mierda?- le tiro un golpe en el hombro.
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Narra Caroline
Estoy leyendo una revista en la sala, Klaus esta demasiado atento en la laptop que ni me presta atención.
-¿Hola?- le hago señas.
-Car, sabes que estoy trabajando y necesito terminarlo ya.- me manda un beso y lo recibo.
-Ya.- sigo leyendo aburrida y sonrío al recordar mi deliciosa luna de miel.
-¿Nada de sexo?- pregunta Nik.
-¡No! Scott puede adelantarse y no quiero dar a luz en una playa.- me acaricia y me besa el cuello dejando marcas.
-Nik! No me provoques que no podré parar.- él continua.
-Es que me vuelves loco con ese traje de baño. Además Scott recien tiene 4 meses.- se queja como un niño.
-Pero es un bebe, así que le dices a tu amiguito que se baje ya!- voltea los ojos y se mira el bulto decepcionado.
-¿Te traigo algo?- se para.
-Una piña colada.-
-No puedes tomar.-
-Solo es una pi...-
-¡No!- me calla.- Estas embarazada puede hacerle daño a Scott.- me guiña el ojo y se va por un trago.
Maldito pendejo ya me acorde de eso y le lanzo un cojín.
-Hey! ¿Qué pasa?- pregunta.
-Por lo del Caribe, ¿no me pudiste traer una puta piña colada?- grito y me mira sorprendido.
-Car, eso paso hace 5 meses. Y tú me dejaste con las ganas, no me hagas acordar.-
-¡Mierda, Nik!-
-Ya Car supéralo.- sigue escribiendo en la laptop.
-¡Puta madre! Arrg.- grito desesperada para que el maldito cabrón me haga caso.
-No digas palabras así mi vida, el bebé puede escuchar...-
-¡Concha tu madre, Nik de mierda se me viene el hijo!- grito alterada y él me mira alterado, se agarra la cabeza y da vueltas.
-¿Qué hago?- corre y agarra el bolso preparada para el día del parto.
-¡Nik! Llama a mi madre y dile que vamos al hospital.- corre el teléfono y tiembla nervioso.
-Liz, Car ya dará a luz. Te esperamos en el hospital.- cuelga y suena el teléfono de nuevo, maldita sea con estos dolores.
-Damon, si, bien. Ya viene en camino.- sonríe feliz.- Gracias colega.
