Había sido una larga semana de preparaciones para el campamento, YoonGi es uno de los encargados de organizar algunas cosas, lamentablemente no era quien iría a organizar las personas que estén en las cabañas, osea, no podía impedir que Jimin esté con alguien más, tampoco estar junto a él. Eso le irritó mucho, pues el quería estar junto a Jimin, los dos solos.
El día llegó, las personas que irían al campamento se encontraban al frente del colegio en espera de los autobuses que los llevarían al lugar, estaban divididos en tres grupos, cada quien en su año. Jimin no paraba de ver a YoonGi, el cual estaba pasando lista y verificando que todo esté bien, no podía negarlo, el rubio se veía tan atractivo cuando estaba serio, era su debilidad.
—Poquito y se te cae la baba. —murmuró SeokJin, el cual estaba junto a Jimin.
—Es que se ve muy bien, no puedo evitarlo. —confesó sin dejar de mirar al rubio.
—Mejor prepárate que ya están llegando los autobuses, y si tengo que pelear por los puestos de atrás, lo haré.
—Y yo te acompaño.
El primer autobús llegó, que era el autobús de tercer año, luego llegó el de cuarto año, en donde irían SeokJin y Jimin. Cuando el autobús se detuvo y las puertas se abrieron, ambos subieron de primeros, batallando para que no les roben los puestos, casi se los roban, pero nadie puede con SeokJin y Jimin juntos.
—Este es el mejor lugar, en definitiva. —Jimin sonrió cómodo.
—¡Park!—el menor se levantó rápidamente al escuchar la voz de uno de sus profesores.
—¿Si?
—Ese no es su lugar. —el menor lo miró confundido. —Usted va acá adelante.
—Pero, nadie tiene puestos asignados, profesor.
—Usted sí, venga al frente, irá junto al guía.
Jimin reviró los ojos bastante molesto, el profesor de sociología siempre se encargaba de hacerle la vida imposible, sea cual sea la ocasión. Se sentó en el primer puesto con los brazos cruzados, el profesor Kang lo miraba de reojo.
En eso, YoonGi subió autobús y vio a un molesto Jimin con los brazos cruzados, hasta su rostro estaba rojo del enojo y el rubio no sabía el porque.
—Bebé, ¿por que no estás con SeokJin?—preguntó al estar cerca de él.
—El profesor Kang me asigno este lugar, y claro, no puedo reclamar nada.
—No te preocupes, yo me quedaré aquí contigo.
—Esta equivocado, Min, el autobús está lleno así que debe volver al suyo. —habló el profesor Kang.
—Pero este asiento está libre. —respondió el rubio.
—Sí está ocupado. —justo en ese momento, un chico de cabellos azabaches subió al autobús. Este no tenía el uniforme y parecía ser mayor. —Justo a tiempo, chicos, presten atención. —todos hicieron silencio para escuchar al mayor. —El es NamJoon, será su guía durante el viaje y al llegar los llevará a sus respectivas cabañas, él estará a cargo de ustedes, por lo cual debemos respetarlo y hacer todo lo que él diga, yo me voy.
Y sin más, el mayor bajó del autobús dejando a trece adolescentes a cargo de alguien que apenas salía de su adolescencia. Por un momento hubo un silencio incómodo.
—No se preocupen que no soy un molesto que estará detrás de ustedes. Es un placer estar con ustedes, espero que nos llevemos bien en este viaje.
—Una pregunta. —una chica levantó la mano.