Capitulo⁴⁶

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El sol se alzaba a lo alto en su punto máximo del día. Taehyung odiaba salir a pasear con tanto calor, pero no pudo negarse a la petición de Jimin de ir por un helado, aunque lo había refrescado un poco, su cuerpo se sentía caliente y sudoroso, además que el helado había empezado a chorrear por toda su mano, manchándola y dejándole una sensación pegajosa. Se arrepentía de haber pedido un cono en vez de un vaso como Jimin.

— Estamos bajo un árbol y aun así me estoy asando vivo. — se abanicó con su mano intentando espantar el calor, no tenía nada en contra del verano, pero definitivamente no era su estación favorita.

— Ve el lado positivo, pudiste estrenar los pantaloncillos que tanto te gustaron.

— ¿Son bonitos, no? — movió sus piernas, presumiendo la prenda — Pero creo que engordé, me siento un poco más hinchado.

— Tal vez son los postres que has estado comiendo con Jungkook. — se sonrojó al verse descubierto.

Debido al embarazado, Jungkook había estado comiendo más de lo recomendado y como Taehyung iba a visitarlo frecuentemente, terminaba consumiendo lo mismo que su amigo para no hacerle sentir mal, claro que no era exactamente una tortura para él.

— No quiero ofender a Jungkook rechazando lo que me invita.

— Está bien, de todas formas la cantidad de ejercicio que haces en el trabajo compensa todo lo que comes. — comentó mientras intentaba sacar el helado de los bordes del vaso — Me alegra que ya no te preocupes por las calorías que consumes.

— Deje de hacerlo cuando empezamos a planear tener un hijo, no quiero enseñarle un hábito tan horrible.

Jimin sonrió orgulloso del logro de su pareja y se acercó a sus labios para besarlos. Taehyung sonrió sobre su boca, se sentía como en una cita adolescente; eran dos enamorados en un parque sentados, hablando y pasando el rato sin preocuparse de la vida.

— ¿Estás bien? — preguntó preocupado cuando su omega se llevó la mano a la cabeza — ¿Se te congeló el cerebro?

— No, creo que es el cambio de temperatura. — respondió tranquilizándolo— El sol está muy fuerte y caminamos mucho, tal vez ya es hora de regresar a casa.

Jimin se levantó e inclinó su torso levemente mientras le mostraba la espalda, Taehyung río emocionado y se colgó en su pareja utilizándolo como medio de transporte.

— Me arrepiento de no traer el auto.

— Eres un flojo, hyung.

Dulce ronroneoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora