Capítulo 7| Susurraré tu nombre

89 9 4
                                    

—Sí, mamá, volveré a casa para la boda de la tía Rosabel ¿Me darán permiso?—Le pregunté a mi madre por teléfono.

—Sí, cariño, haz la maleta.

Volví a mi cuarto en paz y calma , estamos a lunes y me da tiempo de ir y volver para la revancha del viernes , así de paso me salto clases.

Fui a mi cuarto y dejé la puerta entre abierta y Mantequilla aprovechó y se escapó, fui corriendo tras él hasta que choqué con un cuerpo corpulento , subí la mirada y...

—¿Cuantas excusas vas a buscar para estar cerca de mi?—Me preguntó el jugando con mi gato entre sus brazos.

—Se ha escapado , capullo , a ti no te tocaría ni con puntero láser.—Le contesté cogiendo a mi gato de nuevo.

—Bueno, no sabía que tenías alzheimer y has olvidado nuestro apasionado beso del otro día, no importa, cuando sea te lo recuerdo con otro beso, si quieres claro.—Me propuso.

—No. Y si no sabes el porque simplemente piensa en cuantas chicas has besado esta semana , probablemente te costará unas horas pero seguro que lo consigues.—Le contesté.

—Y dale con lo de las chicas ¿No ves qué no he besado a otros labios?

—Ya , claro y la "C " con la que celebraste tu gol es de "Cuanto quiero a mis amigos" no te jode.

—Te recuerdo que te llamas Carlota, con "C"—Me recordó.

Me sentí la persona más tonta del mundo , estoy tan acostumbrada que me llame por sus apodos cursis que se me había olvidado hasta mi propio nombre.

—Ah, ya, claro...—Dije.—Bueno, ten un buen día.

El no pudo evitar reírse.

—Bueno Carlota Crespo, la próxima vez que te dedique un gol te señalaré. A ver si no te confundes. —Dijo vacilándome.

—No, ni de broma, que si no se pensaran que tenemos algo y las chicas me odiaran.—Le dije apartándolo de mi.

—Bueno, pues para que no te confundas , susurrare tu nombre.

Vale , tengo que admitir que hoy a sido bastante mono.

Me puse a meter toda mi ropa en la maleta dando por hecho que él se iría pero no , ahí seguía.

—¿Se te ha perdido algo?—Le pregunté.

—A mí no , pero a ti parece ser que si porque estás metiendo la ropa en el arenero del gato...—Nada más dijo eso se empezó a morir de la risa el solo.

—¡Mierd4! J0der no puedo pensar en tantas cosas a la vez.... Me descentras.

—Oh ¿Te he desconcentrado? Pobrecita, lastima que me dé igual.—Dijo saliendo del cuarto.

Estaba siendo demasiado bonito como para ser verdad , pero bueno, supongo que así es como nos llevamos.

—Bueno, bueno , no quería entrar pero la química que tenéis se puede cortar con un cuchillo.-Dijo Berta entrando.—¿Maletas? ¿A donde vas?—Me preguntó.

—Tengo una boda, veré a mi familia y a mi hermano y volveré aquí a tocaros las narices otra vez.

Berta se río y comenzó a ayudarme a guardarlo todo.

—Carlota Crespo.—Se escuchó desde fuera de mi habitación.

Abrí la puerta y vi a la directora esperándome.

Agh... Otra vez tu. Coge todas tus pertenencias que te vuelves a casa, por fin.—Me dijo La directora Añañarda (Es mi apodo cariñoso)

Secret WhispersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora