CAPÍTULO 24

532 49 16
                                    

Nota antes de leer:

Nota antes de leer:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ok no xdxd. 

Sé que me desaparecí y no hay excusa. Me bloquee por completo y no podía escribir.

Pero por fin está, lo siento muchoooo :( 


..........ʚĭɞ..........

Narra _____:


El escozor de mi piel siendo cortada, me hizo sisear. Alejé la navaja con cuidado de mi palma lastimada y con la mano sana, tomé el recipiente en donde se encontraba mi poción.

Me lo terminé de un solo trago, aguantando las arcadas que me provocaba.

—¿Y bien? —preguntó Merlín sentada del otro lado de la mesa de su laboratorio.

Observé mi herida, la sangre aún brotaba.

—Ha dejado de doler, pero no se cura— respondí limpiando la sangre con un pañuelo.

—Es un avance, aunque esperaba un poco más—. Tomó mi mano entre las suyas y aplicó una gota de elixir de curación en ella. Mi herida se cerró al instante—. Has estado distraída estos últimos días.

—¿De verdad?

—Hay algo que te preocupa. ¿Qué es?

Agarré un puño de especias, las coloqué en un recipiente de porcelana y comencé a molerlas para iniciar de nuevo.

—No hay nada que me quite el sueño en estos momentos. —vertí agua y los polvos que Merlín me dio. —¿Podemos hacer algo con el sabor? Si vuelvo a probar otra como esas, te juro que moriré.

Merlín se levantó de su asiento y rodeó la mesa para quedar a mi lado. —Está bien si no quieres hablarlo, pero no te guardes las cosas, a la larga hacen daño. —Me tendió dos tubos de ensayo tapados, con liquido rojo dentro de ellos— Sabor fresa y cereza, están hechos de fruta natural. Esto debería ayudar, aunque tu falta de concentración es la que provoca el mal sabor. Cuando la poción te quede perfecta, no deberá saber mal.

—Bieeen, trataré de concentrarme mejor— miré los tubos, eran prácticamente iguales —¿Cómo sabes cuál es cuál?

Ella se encogió de hombros—, sólo lo sé, oh, es verdad, tu alergia. Este es el de cereza— me extendió uno de ellos. —Dejaré el otro de este lado— dijo, colocándolo en la esquina de la mesa.

—Gracias— dejé el otro junto al cuenco en donde estaba mi preparación.

Unos golpes del otro lado de la puerta nos interrumpieron. Merlín se acercó a la puerta para abrirla.

—Hola, hola, señoritas— saludó el capitán entrando al laboratorio con Hawk detrás de él.

—Buenos días— dijimos a la vez.

DIGNO DE TU AMOR  [ King y tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora