Amy una joven contadora, educada amable y carismática, jamás imagino todo lo que viviría.
Elliott el gran, Elliott Santoro les dara muchas sorpresas a todos los que creyeron conocerlo, descubrirá que buscar la felicidad en el mismo lugar donde no l...
Mi cabeza se sentía pesada, la jaqueca me estaba matando, la copa de vino de ayer se volvió la botella completa, no solía tomar, pero ayer fue un día pesado. De pronto tocaron a la puerta, no quería abrirla pero pase por el cuarto de Adriáno y su cama estaba perfectamente tendida, claramente no había llegado a dormir, entonces una pequeña preocupación me invadió, volvieron a tocar y creí que podría ser Adriáno, tal vez perdió sus llaves.
- ya voy, ya voy! - abrí la puerta y un tipo alto, delgado y de tes apiñonada me sonreía mirándome de arriba a abajo. - Hola, soy Naum, soy tu nuevo vecino, me acabo de cambiar aqui alado, y quería saber si tendrías un poco de agua, esque aun no vienen a conectarme el servicio y necesito un poco, solo serán un par de baldes. - Su mirada estaba puesta sobre mi, y esque aun no me daba cuenta que salí con pijama y descalza. - claro, claro, solo permiteme un poco, necesito cambiarme - - para mi, luces perfecta - Su sonrisa era hermosa y sus ojos marron, eran expresivos y muy bellos.
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El nerviosismo llegó a mi y solo cerré la puerta después de sonreir. Corrí a mi cuarto y trate de ponerme algo sencillo y lindo solo para poder salir a atender al nuevo vecino, Naum.
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- lamento la tardanza, adelante, pasa- - gracias.... Mmmm - - oh, soy Amelia, Amy - - un gusto Amy- - amm... la llave esta aquí y puedes venir por agua las veces que gustes - - eres muy amable, pero solo estaré un rato aquí, aun tengo rentado mi departamento y solo estoy viniendo a poner en forma la casa, para poder instalarme - - a entiendo, muy bien, pues lo que necesites...... - - que tal un café, contigo - - Perdón? - - sii, que si podríamos tomar un café juntos, un día de estos, eres una chica muy linda, no quisiera perderme la oportunidad de conocerte, claro a menos que tengas pareja, tienes pareja?? - - ah....no!, no! Para nada y claro, por que no - - eso me agrada, muy bien, muchas gracias espero y creo que nos veremos pronto. - - claro, por nada, hasta luego -
Que!!, no podía creerlo, siempre fui la chica rechazada y de un momento a otro, dos chicos no para van de buscarme y un extraño me invita a tomar un cafe y me dice que soy linda. El dolor de cabeza se me había olvidado, obviamente y de pronto volvía a sentirme bella, los problemas en mi cabeza se disiparon un poco, pero de pronto recordé a mi hermano, no había llegado y ya era pasadas las 9 de la mañana, corrí por mi teléfono y trate de prenderlo pero nada, cielos se había descargado, lo puse a cargar y lo prendí, los mensajes de Adriáno y unas cuantas llamadas de Cleo, y mi hermano se encontraban en la pantalla. Y se encendió de nuevo una llamada de Adriáno.
- en donde te metiste toda la noche Adri, seguro anduviste de..... - - Amy!!!! Massimo tuvo una embolia, estamos en el hospital San Lucas, te estuve llamando toda la noche, pero no respondiste - - Que!! Lo.....lo siento, llegue muy mal y...... Lo siento, voy para allá Adriáno, e... El está.... Bien?? - pregunte con miedo y las lágrimas comenzaron a salir. - esta en observacion, pero Clare se puso muy mal, tuvieron que darle un par de calmantes, oh Amy, acá te explico - - claro, claro, voy para haya -
Sentía mi corazón salirse, no sabía que había ocurrido, y menos entendía que hacía Adriáno con Massimo, cuando el estaba un poco renuente en ir, pero solo me lave los dientes y tomé mi bolsa para salir corriendo al hospital.
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Llegue y en la sala de espera estaban todos, sentados y con mucha distancia, Adriáno y Cleo, y unas 10 sillas separadas de ellos, Elliott y Alonzo, cuando llegue corriendo, Elliott me miro, sus ojos estaban rojos y muy hinchados, su camisa abierta y su chaleco desabotonado, su labio estaba rotó e hinchado su ceja con unos vendoletes y un par de manchas de sangre en su camisa me indicaban qué había algo más, y así como volteo a verme se agachó, Dante venía llegando de un pasillo con un par de cafés, Adriáno se levantó a recibirme, y tiro de mi para llevarme lejos de la sala.
- Adriáno! Que paso, que haces tu aquí, por que......- entonces lo vi, tenía la camisa sin un par de botones y sus nudillo estaban hinchados, su pómulo con un golpe y una pequeña herida en el mismo. - mirame Adriáno, que fue lo que pasó, dímelo!! - - baja la voz Amy, tranquila, Elliott y yo tuvimos una pelea, Massimo me llamo para verlo, quería hablar conmigo de trabajo....... Y me encontré con Elliott, Amy fue algo...... Amy, Clare ya sabia todo, siempre lo supo, Dante se lo dijo cuando sucedió, pero Massimo no, la discusión entre Elliott y yo creció y nos fuimos a los golpes en el salón de juegos, Amy, a Massimo le dio la embolia por nuestra culpa, por mi maldita culpa, Amy!!!, fue por dejarme llevar por ese maldito! - - calmate Adri, tranquilo, el......... Estará bien, lo sé, es un hombre fuerte siempre lo ha sido, Clare, donde esta Clare - - Clare se puso muy mal cuando nos vio moliendonos a golpes y después vio en primera fila a Massimo desmoronarse, se puso muy mal y llamamos a la ambulancia, cuando llegaron Elliott estaba con Massimo y yo tenia a Clare en mis brazos, no podía detenerla, es fuerte muy fuerte, los paramédicos le dieron un calmante y los trajeron aquí, supongo que Elliott le aviso a Dante y yo llame a Cleo para que te pusiera al tanto pero jamás respondiste. - - Adriáno, lo siento, ayer fue un día pesado y me tomé..... Una botella de vino tinto, creo que mi sueño estuvo pesado, aparte mi teléfono se descargo, en verdad lo siento, vamos ve a casa y date un baño, yo estaré aquí pendiente, vamos lo necesitas - - No!!, no me iré hasta tener noticias de ellos - - Adriano, sabes que sentirán ellos de verlos así, despertar recien y observarlo aún ensangrentados y desalineados, vamos ve ahora, bañate y regresa más tranquilo, yo te avisaré cualquier cosa - - ok, no tardaré, lo prometo -
Camine a la sala de espera y solo estaba Elliott, pensé mucho en acercarme, creí que no sería buen momento, pero crecí con el, y no podía ignorar su dolor.
- Elliott, todo estará bien ya lo veras - me acerque y puse mi mano en su hombro, me senté junto a él, pero no levanto su rostro - lo se, es un viejo roble, nada lo derribara - - así será, ya lo veras - - gracias - Dijo levantándose de golpe, quitando mi mano de su hombro y yéndose sin siquiera verme.
