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Sasuke se encontraba caminando por los pasillos del castillo, buscando por todas partes a Sakura.

Estaba dipuesto a proponerle matrimonio antes de que se fuera a los territorios Harunos mañana, luego de la grandiosa cita que tuvieron dieron un pequeño paseo por el bosque antes de regresar al castillo.

Luego de que regresarán su tío le dio el sermón de su vida, solo porque se fue al pueblo sin haberle dicho nada.

Como castigo su tío al día siguiente lo mantuvo ocupado, con problemas políticas ya que Sasuke necesitaba aprender todo eso para estar preparado para gobernar, el Uchiha menor ahora entendía el porqué Itachi no quería el trono.

Era una verdadera tortura su tío no le tuvo piedad alguna, aunque si tuviera la oportunidad de regresar al pasado haría todo de nuevo, con tal de tener esa cita con la pelirrosa.

Aún recordaba aquella cita tan maravillosa habían tenido.

Un largo suspiro salió de los labios del pelinegro, al no poder encontrar a su amada, por ningún lado.

- En donde podrá estar- susurro el azabache quien sentía como sus músculos seguían tensó, gracias al duro trabajo que su tío le dio.

"De seguro debe de estar hablando con Izumi"

Pensó, para luego empezar a caminar hacia la habitación de su hermano, una vez que llegó, estaba apunto de tocar la puerta, pero se detuvo al escuchar cierto ruido en la habitación.

- ¡Ah!, Itachi... Mas... Ahh..

- Izumi... Grr... Ah..

Sasuke puso los ojos en blanco al escuchar, como su hermano estaba teniendo relaciones con su cuñada.

Decidió mejor no interrumpirlos y siguió en busca de Sakura.

Volvío a retomar su camino, mirando por todas partes y preguntando a las sirvientas o a los trabajadores si la habían visto, pero ninguno la vio, haciendo que Sasuke se empezará a preocuparse.

- ¿Buscas a alguien, príncipe?- pregunto una voz familia atrás de su espalda.

- Danzo- dijo Sasuke mirando al hombre, que fue en consejero de su padre y ahora lo era de su tío- estoy buscando a Sakura, ¿La haz visto?.

Preguntó. Danzo puso una cara pensativa por unos segundos, para luego sonreír falsamente.

- oh, la señorita Haruno, hace un momento la vi en el jardín- comento.

- hmp- fue lo único que dijo Sasuke para luego darle la espalda a Danzo.

- si yo fuera usted me daría prisa, uno nunca sabe que tipo de cosas le podría llegar a pasar a la señorita, sin un guardia que la proteja.

Ese comentario causó que un malestar se instalará en el pecho de Sasuke, quien sentía como su estómago ardía como ácido, su mirada se oscureció por completo y miró con una mirada endemoniada a Danzo, quien al verlo de esa forma se puso un poco nervioso.

Era como ver al fantasma de Fugaku Uchiha en persona.

- tranqulicese mi señor, solo era una pequeña broma, pero creo que no debí hacerla- dijo rápidamente el hombre dando una reverencia- disculpe mi ofensa, no volverá a suceder.

El azabache lo miro por unos segundos, para luego correr hacia el jardín, donde Danzo le había dicho que estaba la Haruno

Danzo levanto la mirada, viendo como la silueta de Sasuke desaparecía rápidamente por los pasillos, una mueca de disgusto apareció en su rostro, por un maldito segundo pudo ver en Sasuke a Fugaku, esa mirada que le había dedicado cuando hizo mención, de que alguien podía dañar a la pelirrosa, ya la había recibido antes.

el comienzo de la primavera (Sasusaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora