* I only have the stars *

Sólo quiero ver tus ojos de nuevo

Miraba el piso nervioso y a cada segundo volteaba a ver el reloj que parecia que no se movia. La misma enfermera se volvió a acercarse, me paré en busca de información.

-Ya puedes pasar- me sonrió

-Gracias- le sonreí devuelta

Sin pensarlo, corrí hasta la sala donde ella se encontraba, abrí sin hacer ruido la puerta y entre a la habitación. Ahí se encontraba Elizabeth durmiendo sobre la cama, se veía pálida pero lo que importa es que segía viva.

Me acerqué a ella y me senté en una silla junto a la cama, agarré cuidadosamente su muñeca vendada y le dí un pequeño beso. Ni siquiera pensaba en lo que hacía, yo nunca he sido así pero la he extrañado tanto y casi la pierdo.

Esperaba a que en cualquier momento despertara para volver a ver sus ojos grises pero ya han pasado muchas horas y aún no despertaba. Mis ojos se cerraban, ya era  de mañana y aún no despertaba; me estaba empezando a impacientarme.

La enfermera entró y me dió una mirada compasiva, caminó hacíamí para levantarme y ponerme en el sillón enfrente de la cama.

-Necesitas dormir

-Pero....si despierta y yo estoy dormido?

-Te despertaré antes

-Esta bien.....gracias

La enfermera me sonrió y se dió la vuelta para salir de la habitación. No soporté mas y caí en un sueño profundo, era lo que necesitaba.

~Horas despues~

Oí voces que discutían, no me dejaban dormir más así que abrí los ojos. Ví a dos adultos hablando por telefono, un hombre y una mujer que tenían cierto parecido a Elizabeth.

Me senté lentamente aún adormilado, los dos sólo se limitaron a mirarme, creo que no se habían percatado de mi presencia. Ambos me recorríeron la mirada de arriba hacia abajo examinandome como si fuera una cosa mientras los dos hablabam por telefono.

-Quién es este?- preguntó la mujer

-Yo que se- respondio el hombre

-Por si se han dado cuenta puedo escucharlos perfectamente, además no creo que lo  hayan hecho ya que no paran de hablar por el maldito telefono mientras Elizabeth se encuentra en graves condiciones. Ahora me harían el favor de apagar su p**o telefono?!- les respondí eonojado

Por su comportamiento supuse que eran los padres de Elizabeth, quienes se quedaron con la boca abierta por lo que les había dicho, cerraron el celular y se me quedaron viendo.

-Y por cierto, me llamo Eros- sonreí sinicamente

Caminé hacia la puerta con su mirada siguiendo mis movimientos, abrí la puerta y salí de la habitación enojado. Fuí por un vaso de agua para tranquilizarme y por algo de comer ya que no he comido absolutamente nada desde lo que ocurrió con Elizabeth.

Me sente en una mesa a comerme lo que me habían servido, lo que había en la mesa ahora era historia. Sólo quedaba el vaso de agua, lo miraba pensativo reflexionando todo lo que ha pasado.

Sólo quiero volver a ver a Elizabeth despierta y a esos ojos llenos de alegría...