Esperanza

406 20 0
                                        

Suspiros. Es solo lo que hacía para poder tranquilizarme, sentía que en un suspiro podía expulsar un poco del dolor guardado en mí. Sin Eros en mi vida, ya no habría más dolor? A veces pienso lo contrario. Solo algunos días habían pasado desde que lo conocí y cambio mi vida totalmente, en esos pocos días yo ya sentía algo hacia él.

Pero ahora todo se echó a perder, por qué ahora si iba todo de maravilla? Todo era perfecto, pero lo tuvo que arruinar, yo estaba acostumbrada a que me trataran mal o jugaran conmigo pero con él es diferente.

Tratando de no pensar más en eso para no hacerme más daño del que ya me hice, me levante lentamente de la cama y toque con las puntas de mis pies el suelo frío. Mi estómago me pedía a gritos algo de comida así que decide ir por algo de comer y distraerme de mis propios pensamientos.

Con pasos lentos llegué a unas mesas donde enfermeras se acercaban a preguntarme qué se me apetecía comer. Al cabo de unos pocos minutos las muy amables mujeres me trajeron la famosa comida de hospital, sí, famosa por su horrible sabor. Pero con hambre eso no me importaba tanto en estos momentos, así que me concentre en comer todo lo que se encontraba en el plato.

Un pensamiento inoportuno llegó a mi mente, yo estaba segura que había perdido demasiada sangre como para seguir viva. Podía prácticamente ver un charco de sangre alrededor de mi muñeca y en ese mismo momento mi mente se había nublado. Pero sin embargo seguía viva y ahora me encontraba comiendo esta asquerosa comida.

Camine de vuelta a mi cuarto, solo quería llegar a acostarme y tratar de poder dormir. Llegue y me recosté lentamente en mi cama, me sentía todavía muy débil, extrañaba mi IPod principalmente por mi música. Yo no podía vivir sin ella, ya que cuando me disponía a oírla me alejaba de la realidad y solo me enfocaba en oír y tararear la canción.

En ese instante recordé que tenía mi preciado IPod en mi pantalón, agarré este y saque el IPod del bolsillo junto con mis audífonos. Me coloque cada uno en ambos oídos y me dedique a oír mis canciones, cerré mis ojos para relajarme un poco. Empecé a cantar mi canción favorita hasta que me paralicé al oír la siguiente estrofa…

“Cause even the stars they burn

Some even fall to the earth

We've got a lot to learn

God knows we're worth it”

Mi boca se entreabrió un poco y una lágrima se escapó de mi ojo,  al reaccionar instantáneamente lleve mis manos a los audífonos para quitarlos pero antes oí el coro que me hizo reflexionar un poco.

“I won't give up on us

Even if the skies get rough

I'm giving you all my love

I'm still looking up

Still looking up.”

Decidí escuchar el resto de la canción y me hizo reflexionar demasiado, en el momento que la canción termino me quite mis audífonos y llegue a una conclusión. En estos pocos días Eros había logrado atraparme en su encanto sobrenatural, era la única y primera persona que por fin me trataba bien y no lo perderé.

Al tratar de fabricar un plan para mi huida del hospital, recordé lo que Eros me había dicho el día que nos conocimos “…una dulce y delicada voz me decía así. Esa dulce y delicada voz eras tú…” si lo que Eros decía era verdad, entonces se supone que yo podría llamarlo y él me oiría de alguna manera. Pero ahora, cómo se supone que haré eso?

Eros’s P.O.V

Caminaba sin rumbo con mi mirada pegada al suelo sin ninguna expresión en la cara, si de salvar a Elizabeth implica que me vaya de su vida lo haría sin preguntármelo dos veces, con tal de que este a salvo. Qué es este dolor en el pecho? Nunca había sentido algo así en mi vida, ahora que me doy cuanta mi vida era un asco antes, yo mismo me doy asco. Todo era lujuria, ego, mujeres, y “diversión” en mi propio estilo.

Como solo una simple persona puede hacerte cambiar, le agradezco a Elizabeth por haberlo hecho. Acaso esto es lo que los humanos llaman “amor”? creo que sí, y también debo imaginar a las estrellas observando felizmente como una humana me había roto el corazón a mí, al mismo que rompió el corazón de ellas.

-Crees que te escaparías tan fácil de mí idiota?

Me gire a enfrentarme con Britney a una Britney muy enojada con aquel mismo cuchillo extraño, tal vez me mate pero en realidad no me importaría en lo absoluto en este momento. La estrella que me había traicionado una vez en el universo se acercó amenazadoramente hacia mí.

“Eros? Eros no te vayas…”

La voz de Elizabeth retumbo en mi mente, su voz se oía triste. Britney estaba a punto de encajarme el cuchillo pero por suerte reaccioné a tiempo, rayos ahora que haré sin ninguna defensa? Me matará.

-Acaso crees que no cumplo mis palabras, Eros?

-N-no yo solo- me tuve que agachar para esquivar su ataque

-Cállate, de todas maneras te mataré

Antes de que se volviese a acercar, patee su rodilla lo suficientemente fuerte como para lesionarla y ahorrar un poco más de tiempo. En ese momento corrí lo más rápido que pude, me escondí y trate de buscar a mi alrededor algo con que defenderme pero solo pude encontrar un escoba, genial.

* I only have the stars *Donde viven las historias. Descúbrelo ahora