06. Déjalo ir

207 43 7
                                    



La misión del robó de tumbas con los monjes ninjas del templo fuego no había salido del todo bien.
Sora y Naruto resultaron muy heridos por sus transformaciones. Sai también se lastimó el brazo cuando se encontró con Sakura esa noche.

— mira Akiira si lo alcanzamos

Naruto corre al ver a Sora apunto de partir de nuevo al templo fuego ya una vez que terminada su curación.

— Hola muchachos — nos saluda con un inclinamiento de cabeza. — lamentó no despedirme.

Suelto una pequeña risa mientras restó importancia con la cabeza. — No importa, debes estar feliz de volver a casa

— En realidad no, planeo conocer el mundo y conocer a tantas personas como tú Naruto. Conocer tantos amigos como tú  — mi amigo sonríe sonrojado y se rasca su nuca. 

— Pero ven a visitarnos de vez en cuando ¿si?, Konoha siempre te recibirá con los brazos abiertos.

Sora asiente en respuesta a Sakura y se despide de nosotros.

Hace tiempo que no siento esta tranquilidad. Debo admitir que comienzo a acostumbrarme a este hospital. Desde que regresé a Konoha he pasado gran tiempo aquí si es que no estamos en una misión.

Cuando Naruto salió del hospital decidió que seguiría su entrenamiento con Kakashi. Sakura Sai y yo tratábamos de verlo y llevarle comida, suplementos y bebidas para que se hidrataran. 

Conforme pasaban los días

Yo también había decidido empezar con mi entrenamiento con ayuda del capitán Yamato. Quien terminaba exhausto ya que por las mañanas ayudaba a Naruto con su entrenamiento y por las tardes el mío.

Mi cuerpo no estaba acostumbrado a las cantidades de chakra que necesitaba en mis entrenamientos así que prefería entrenar un poco. Así que yo era la única que casi no visitaba a Naruto.
Solita visitarlo no un tiempo máximo de media hora. Mis días consistían en eso.

Entrenar todo el día y si me sentía positiva también de noche.


Corrí tan rápido como pude y cuando llegué allá Sakura se sorprendió al verme allí.

— ¡Capitán Yamato! — el jounin se sorprendió al verme correr hacia él.

Kakashi se acercó junto a Naruto preocupado, aunque bajaron la guardia al ver mi sonrisa.

— ¿Que sucede Akiira? — dice el rubio confundido. — ¿Quieres ver mis avances?

Antes de que siguiera hablando comencé a negar con la cabeza.

— Hoy no Naruto, lo siento necesito hablar en privado con el capitán Yamato.

Todos se sorprendieron y a regañandientes nos dejaron solos. Kakashi-sensei no nos quitaba la vista de encima y cuando notó que lo estaba viendo fingió que conversaba con Naruto.

— ¿Te sientes bien Akiira?

— Tiene que ver esto, hice lo que me pidió. Me concentre y medité y medité y medité. — reí al ver su cara de confusión ante la velocidad con la que las palabras salían de mi boca. — Mire esto

Extendí mi mano hecha puño hacia él y la abrí lentamente. Al principio no pasó nada, pero a los segundos una pequeña flor crecía en el centro de mi palma

Estaba sorprendido, después de tanto por fin había dado frutos los entrenamientos. Golpee su brazo con mi mano libre

— Es sorpréndete — dijo después de unos segundo y de repente comenzó a reír emocionado. Sin pensarlo mucho lo abracé. — Y en muy poco tiempo. Akiira tienes tanto potencial.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: 2 days ago ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

ʙᴇʟʟᴀᴛᴏʀ: ᴄʀᴏɴɪᴄᴀs ᴅᴇʟ ʜᴜʀᴀᴄÁɴ ||02||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora