decisiones (rengoku x t/n)

capitulo 4

tenía la boca seca y me removí entre las sábanas negras, el olor de perfume masculino llenó mi nariz y sonreí…

¿dónde mierda estoy?

Me senté, estaba en una habitación gigante, el solo cuarto era más grande que todo el apartamento en donde vivía, una pared completa era un ventanal que daba a una hectárea verde y un lago.

la habitacion era simple pero extremadamente elegante, la cama era tres veces mas grande que la mía y un espejo habia a un extremo de la habitacion, en un rincón habia unos sofás negros que combinaban con todo lo demas y a un lado de la cama una mesita de noche con una fotografía

la tomé para mirarla y…

x: oh, lo siento -miré a la puerta, había un chico dándome la espalda, su cabello y su porte me recordaron a… mierda, recordé todo… o casi todo- llamaré a mi hermano para avisarle que despertaste

cerró la puerta, tomé las sabanas para taparme y esperé inmovil para que alguien entrara por esa puerta, y cuando alguien por fuera giró el pomo y entró

t/n: oh dios -las lágrimas empezaron a caer por mis ojos- oh dios, pensé que te había matado, yo… -rengoku quedó paralizado cuando me vió correr hacia él y lanzame a sus brazos- lo siento, no sé qué me pasó anoche, yo no soy… una… m-me… me van a matar -susurré la última frase-

rengoku me apartó de su cuerpo en donde me había quedado inmovil y me sonrió amablemente

rengoku: no la vamos a matar, pero es mejor que se vista, vendrán a visitarla para saber cómo está -quedé sin habla- tranquila, está todo bien -apuntó con la barbilla una puerta que había en la habitación- su ropa y cosas personales estan en ese closet, póngase cómoda y la espero en la sala

el chico se dió vuelta y caminó a la salida

t/n: espera -se giró a mirarme- ¿dónde estoy?

rengoku: en mi casa -sonrió- que ahora será su casa

t/n: ¿que?

rengoku: por favor vístase y después podremos conversar

en ese momento miré el espejo que estaba a un lado y me dí cuenta que estaba con una camiseta de hombre y pants, el corazón me volvió a latir como loco

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me demoré mucho mas de lo necesario, ya que revisé la habitación y cada centímetro para saber si había posibilidad de salir, y la única salida que había era la puerta que daba al interior de la casa y la otra que daba al patio, pero esa puerta está cerrada, así que mi destino es ir a la sala.

Avancé despacio, aunque esté tipo, rengoku, se veía amable, aún había algo que no me hacía confiar en ellos. Todo ese cuento de demonios que comen a otras personas me suenan a puras mentiras, llegué a un pasillo y se escuchaban voces y por supuesto, me quedé escuchando

Uzui: ¿Por qué se demora tanto?

Rengoku: debe estar buscando la forma de salir y a menos que rompa una ventana no podrá hacerlo

Sanemi: nos queda un tiempo entonces, por qué parece que no es de las que se rinden fácil

Tomioka: -resopló- ¿Por qué no la van a buscar a la fuerza? -se escuchó un golpe- Pero…. Shinobu -se quejó

Shinobu: ¿Cómo ha estado?

Rengoku: estos tres días inconsciente, recién despertó y parece… de buen humor

¿Tres días inconsciente? Me tomé la cabeza…

Sabito: ¿Tres días? Por dios himejima, casi la matas con el golpe que le diste

Himejima: se supone que es un demonio, iba a aguantar…

Iguro: ¿Que vamos a hacer con ella?

Rengoku: ¿Qué quieres decir? -su voz sonaba tensa- hay que tratar de curarla

Mitsuri: kyojuro…

Rengoku: ¿Qué?

Iguro: rengoku, ¿desde hace cuánto eres cazador? -silencio- respondeme

Rengoku: desde los 12

Iguro: ¿Y ahora tienes?

Rengoku: 27 -su voz sonaba tensa-

Iguro: y dime a cuántas personas hemos logrado recuperar después que fueron convertidos -más silencio- a nadie

Rengoku: Eso no significa que nos vamos a rendir ¿O si?

Sanemi: ¡por dios! Ya te vas a colocar como el caballero que tiene que rescatar a la damisela en peligro

X: escuchar conversaciones no es muy educado -escuché un susurro detrás de mí que casi me hace gritar, pero el chico tapó mi boca- soy senjuro, el hermano de kyojuro -saqué su mano de mi boca

T/n: no se te nota -dije sarcásticamente en su mismo tono de voz-

Se rió

Senjuro: Tienen para rato ¿Por qué no me acompañas a la cocina? hasta que dejen de discutir como niños

T/n: hasta que decidan si deben matarme o no…

Senjuro: no lo harán

T/n: ¿Por qué estás tan seguro?

Senjuro: mi hermano preferiría dar su vida antes -sonrió- vamos, estoy terminando de cocinar y te explico toda esta locura…

Lo seguí a la cocina, la casa era verdaderamente grande, si esto es una secta, de seguro rengoku es el líder, es eso o es un mafioso por qué una casa así debe valer millones.

Me detuve en seco cuando ví una puerta en la cocina que estaba abierta que daba al exterior

Senjuro: si quieres puedes irte -dijo despreocupado volviendo a picar algunas verduras-

T/n: claro y das aviso para que me maten

Senjuro: no, no les voy a decir nada a nadie, no quiero que te tengan en contra de tu voluntad… vete, si es lo que quieres

Dí un paso, y luego volví a mirar al chico

T/n: ¿Cuál es la trampa?

Senjuro: ¿Trampa? -me miró divertido- ninguna, solo una verdad -me quedé en silencio esperando a que continuara- si te vas ahora, en unos días morirás por qué no podrás colocar un pie a la luz del sol, si te quedas mi hermano hará lo imposible para poder salvarte.

T/n: pero al final me va a matar igual, si es que todos esos cuentos de ustedes son verdad

Senjuro: solo hay una forma de saberlo -me miró fijo- si te quedas tendrás que creer en esos locos que están en la sala y pelean hasta por lo más insignificante, pero si te vas… dobla a la izquierda, hay un bosque a unos kilómetros y quédate ahí escondida por el día, si ves a algún hombre con traje escondete por qué van a cortar tu cabeza -rodó los ojos- juran que son los hombres de negro

T/n: ¿Cortar… que?

Senjuro: es ahora o nunca t/n… te buscarán por toda la casa -apuntó a una pantalla que estaba en una mesa, eran cámaras de seguridad y la que daba a la sala mostraba a todos saliendo de ahí

…

¿Es momento de arrancar?