decisiones (rengoku x t/n)

capitulo 19

Rengoku les pidió a los chicos que no dijeran nada, y solo tuvimos que confiar en ellos ya que a los pocos minutos llegó una tropa de personas a la casa a arreglar todo, Sabito me sacó del lugar, y me llevó a un apartamento que ya estaba dispuesto para los hermanos rengoku y yo, hasta que construyeran otra vez la casa.

Es una buena organización al parecer.

Sabito no se pudo quedar conmigo ya que tuvieron una reunión urgente, y yo me quedé con otros cazadores de menor nivel en el apartamento esperando a que amaneciera 

Eran las 8 am, Senjuro llamó, le conté un poco lo que había pasado, aunque él entendía mejor que yo como funcionaba esto. Le tuve que asegurar más de 10 veces que su hermano estaba bien, se iba a quedar dónde sus amigos hasta la tarde para que su hermano no se preocupara y pudiera organizar todo.

Estaba en el sofá, el apartamento tenía una hermosa vista a la ciudad, todo era muy similar a la casa de rengoku, ya estaba sola y no había podido pegar el ojo esperando a tener noticias, me había duchado y puesto una ropa que había en el lugar para mi.

Sentí el ruido en la puerta y me giré de inmediato, cuando ví a Rengoku entrar se deshizo el nudo que tenía en mi estómago

Él sonrió al verme

Rengoku: ¿Cómo estás? 

T/n: bien ¿Y tú?

Rengoku: bien -se sacó la chaqueta, lo ví caminar hacia un closet para guardarla- ¿Senjuro ya llegó? -iba caminando a la cocina, yo lo iba siguiendo-

T/n: no, dijo que se iba a quedar dónde un amigo y volvía a la tarde

No alcanzo a entrar por que de inmediato se dió vuelta y me tomó de la cintura para besarme, sus labios tomaron los míos con ansias, sus manos en mi cintura querían acortar las distancias lo más que pudiera

Rengoku: ¿estás segura de que estas bien? -miró mi rostro, no había ningún rastro de la pelea de la noche anterior-

t/n: eso debería preguntarlo yo -tenía mis manos en su pecho, podía sentir las vendas que había debajo de su ropa

él asintió con la cabeza y me dijo: estoy bien, esto es de rutina.

nos quedamos mirando a los ojos, podía ver la preocupación en ellos

t/n: ¿qué es lo que me está pasando?

él apretó los labios muy preocupado

rengoku: no lo sé 

t/n: ¿es probable que muera? -el se quedó en silencio- dime la verdad

rengoku: si, si no es por que tu cuerpo no aguanta la transformación, es por que te convertiste en demonio y debemos… 

se quedó en silencio otra vez pensando bien sus palabras, pero al parecer no las encontraba

t/n: dilo -sonreí con pesar- ya lo has hecho antes, ahora sería lo mismo 

rengoku: no es lo mismo, nada es lo mismo ahora t/n -acarició mi mejilla- no te ocurrirá nada, lo prometo

t/n: no hagas promesas que no vas a poder cumplir -le susurré- si me llego a convertir debes asegurarme de que cumpliras con tu deber 

rengoku: no…

t/n: no es tan solo por los demás -lo interrumpí- es por mí, no podría vivir con la culpa de haber matado a alguien, aunque no esté consciente de lo que estaba haciendo -ví como sus ojos se cristalizaron- prometemelo

Rengoku: te lo prometo -salió de su boca tan despacio que apenas fue audible, aclaró la garganta para que su voz saliera más firme- pero todo saldrá bien -me besó- te sanarás y vivirás una vida feliz, así que… -suspiró- aprovechemos este tiempo en donde nuestras vidas se cruzaron, aunque sea por un breve instante

t/n: ¿cómo crees que podría olvidar a la persona que trató de salvarme desde el primer momento? -bromeé- no te olvidaré

Rengoku: eso espero 

toc toc

miré hacia la puerta 

Rengoku: lo siento -me miró con pesar- es shinobu 

y eso significaba más pruebas e inyecciones

fueron horas de inyecciones, de cortes que no sanaban al instante y que se quedaron ahí, goteando sangre todos se miraban desconcertados y no sabían qué hacer ni que decir, diferentes cosas que metian en mi cuerpo a través de una jeringa y luego de 10 minutos me sacaban una muestra de sangre Rengoku pidió varias veces hacer un descanso, pero yo decía que no pasaba nada, que podía seguir, pero cuando ya estábamos en la muestra de sangre… ¿20? ya había perdido la cuenta, mi cuerpo quiso caer en la camilla que habían traído

Rengoku: ok, ya basta -dijo molesto mientras se colocaba a mi lado para sujetarme- ¿t/n?

t/n: e-estoy bien, solo un poco mareada

Shinobu: solo me faltan dos muestras más y…

Rengoku: dije que nada más -miró molesto a su amiga- no es una rata de laboratorio, es un humano

shinobu: ok, lo siento -levantó las manos en señal de inocencia- solo quería asegurarme de tener la sangre suficiente

Uzui: creo que tienes que asegurarte de que a t/n le quede la sangre suficiente para vivir

sanemi: estamos haciendo esto para ayudarla, no se molesten tanto

Uzui: mira como está, no la estamos ayudando precisamente

Sabito: aunque yo creo que con las muestras que ya tenemos es más que suficiente, ¿le enviaran algunas a tamayo? 

Kanae: si, necesitamos su ayuda

iguro: pues entonces vamos andando, t/n necesita descansar

mitsuri: amor -le dijo a iguro- yo me quedaré, de seguro Rengoku necesita ayuda

Rengoku sonrió y le dijo: gracias

Uzui: también me quedo -me sonrió- los demás… ¡FUERAAAAA!

Cuando todos salieron, Rengoku me llevó en sus brazos a la habitación principal, estaba tan cansada que a los pocos minutos me quedé profundamente dormida entre las caricias del hombre que se quedó a mi lado.

no sé cuánto tiempo pasó, pero me desperté en medio de una pesadilla.

estábamos en la pelea de la noche anterior, pero en vez de pelear con el demonio lo hacía con Rengoku, y lo mataba 

desperté desorientada y demasiado acalorada, la cabeza me daba vueltas, como pude salí al balcón, sentía que me faltaba el aire en los pulmones, sentía los ojos pesados, y por primera vez pude ver como las heridas que me habían hecho en las manos se estaban cerrado automáticamente, me asusté, algo estaba pasando en mi cuerpo, traté de sujetarme en el barandal del balcón, pero mi cuerpo cedió y caí

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