Primer Arco: ❝ Bowser, después de capturar a Luigi, idea un extraño y retorcido plan para llegar hasta Mario, ayudándose de la ingenuidad de Luigi para lograrlo, sin embargo, jamás pensó que su búsqueda por destruir al plomero de rojo terminaría en...
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Someone told me stay away from things that aren’t yours… but was he yours if he wanted me so bad?
❝ 𝓛𝓾𝓲𝓰𝓲 ❞ 『 💚』
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Un mes había pasado desde que habían vuelto a Brooklyn. Habían tenido que explicar muchas cosas a su familia, pues desaparecer por varias semanas, no era algo normal. Nunca contó nada de lo sucedido en el castillo, nunca dijo siquiera una palabra de Bowser.
Intentó recuperar su vida, estaba aliviado de estar de nuevo con su familia, con Mario, pero sentía como si le faltara algo… Se decía a sí mismo que era algo estúpido, pues tenía todo lo que necesitaba ahí, en casa. Pero no lograba estar en paz. Sus noches se volvían largas y difíciles de pasar, sus días se sentían monótonos y rutinarios, casi sentía que su vida había perdido esa chispa de aventura, espontaneidad que antes había tenido. Y sabía a qué se debía. Sabía qué le faltaba.
Pensaba que al volver a casa podría olvidarse de todo, convencerse a sí mismo de que solo había sido un mal sueño y que todo estaría bien.
No había sido mentira: todo estaba bien. Todo menos él.
Era una sensación frustrante, ver que todos parecían avanzar, pero él sentía que se quedaba atrás. Que por más que intentará, se quedaba dónde estaba. Sentía que se hundía. Había escuchado que cuando estás en arenas movedizas debes quedarte quieto y no luchar para no hundirte más, pero aunque hacía eso… seguía cayendo en ese oscuro hoyo.
Llevaba más de una hora acostado en su cama viendo el techo. No estaba pensando mucho, en realidad solo parecía haberse desconectado de su realidad por un tiempo. Suspiró con pesadez y decidió levantarse de la cama. Buscó entre sus cajones una hoja y algo con qué poder escribir. No tardó mucho en escribir una pequeña carta que dejó encima de su cama.
Tomó una mochila, guardó algunas cosas, y después salió de la habitación en silencio. Vio la hora en su celular, eran las dos de la mañana. Esperaba no arrepentirse de lo que iba a hacer. Salió de su casa sin hacer ruido, aún decir a nadie a dónde iba.
Caminó durante algunos minutos. Pensaba en qué diría o qué haría. Empezaba a sentirse un poco nervioso, y odiaba la sensación. Inhaló profundamente, pues ya había llegado al lugar que necesitaba
Miró la tapa de la alcantarilla con dudas, aunque terminó por abrirla y entrar.
[ . . . ]
Fue un viaje largo y tortuoso, estaba lleno de incertidumbre, pero finalmente había llegado. Había llegado al castillo de Bowser. Fue muy complicado llegar, pero sentía que su corazón latía con fuerza, sus manos temblaban suavemente cuando estuvo frente a las enormes puertas. Tocó las puertas, mismas que escuchó resonaron dentro del palacio.
