BloodStar

9# Cacería.

Nieve se sentó entre Zarpa Blanca, Noche, Zarpa Manchada y Zarpa de Vuelo, emocionado por compartir sus experiencias del entrenamiento. Comenzó a relatar con entusiasmo las lecciones de caza y exploración que recibieron. Zarpa Blanca escuchaba atentamente, asintiendo de vez en cuando, mientras Zarpa de Vuelo observaba la escena con una sonrisa. Aunque en un principio su relación con Zarpa de Vuelo parecía un poco fría, la charla y las risas entre los tres aprendices crearon un vínculo de amistad que crecía con cada palabra compartida. Después de que Nieve contará los demás aprendices también comentaron cómo se sintieron en este primer entrenamiento y que habían realizado. La tarde avanzó, y los aprendices decidieron dar un paseo por el territorio del Clan del Sol, disfrutando de la frescura del atardecer. Se detuvieron junto a la roca del líder, un lugar sagrado donde los guerreros se reunían para escuchar al líder o la realización de ciertas ceremonias. 

_ "Dicen que la roca del líder tiene historias muy antiguas grabadas en sus piedras. Algunas hablan de héroes y hazañas de nuestros antepasados"_ comentó Nieve, mirando las imponentes rocas con admiración. Zarpa Blanca, intrigada, se acercó para observar de cerca las marcas en las piedras. Mientras lo hacía, notó que Zarpa de Vuelo se mantenía en silencio, como sumido en sus propios pensamientos.

_ "¿Alguna vez has escuchado las historias talladas aquí, Zarpa de Vuelo?" _ preguntó Zarpa Blanca, tratando de incluirlo en la conversación.

Zarpa de Vuelo levantó la mirada y sonrió. _ "Sí, algunas veces. Mi mentor solía contarme historias antes de dormir cuando era más joven. Me gusta pensar en la conexión que compartimos con aquellos que nos precedieron".

La conversación se desvió hacia las historias y leyendas del Clan del Sol, y los cinco aprendices compartieron risas y curiosidades. A medida que la noche caía, decidieron regresar al campamento, conscientes de que al día siguiente les esperaba un nuevo día de entrenamiento. Al llegar, se separaron para dirigirse a sus respectivos lechos. Zarpa Blanca, aún emocionada por su primer día como aprendiza, se acercó a su lecho y agradeció nuevamente a Zarpa de Vuelo por arreglarlo. La luna brillaba en lo alto, iluminando suavemente el campamento. Mientras se acurrucaba para descansar, Zarpa Blanca reflexionó sobre las experiencias del día. Aunque había comenzado con cierta aprehensión, se sentía cada vez más parte de su nuevo hogar. La amistad con Nieve y nueva amistad con Zarpa de Vuelo le daba la seguridad y la fuerza para enfrentar los desafíos que vendrían. La luna siguió su curso en el cielo, y en el tranquilo campamento del Clan del Sol, los gatos dormían bajo su luz plateada, listos para un nuevo día de aventuras y aprendizaje. Zarpa Blanca cerró los ojos, sintiendo la conexión con su Clan y emocionada por lo que el futuro le deparaba.  

Al día siguiente todos los mentores con sus respectivos aprendices salieron de caza, hoy tocaba esa enseñanza, pero esta vez estarán todos unidos por orden del líder que desconocen la razón, pero a la mayoría no le prestó interés a saberlo. Además los mentores ya planearon que harían hoy. La luz del sol comenzó a filtrarse entre las hojas del bosque mientras Zarpa Blanca, junto con sus hermanas, su mejor amigo Nieve y los demás aprendices, se preparaban para un día de caza especial. Garra Rota, Bigote Blanco, Gran Tiniebla y Tizón de Nube lideraban el grupo, mientras que Alba Nevada supervisaba a Zarpa de Vuelo. 

_ "Hoy cazarán juntos para fortalecer los lazos entre los aprendices y sus mentores. Además, aprenderán a trabajar en equipo", anunció Garra Rota antes de seguir. Zarpa Blanca sintió la emoción fluir a través de ella mientras se dirigían hacia el territorio de caza. A su lado, Zarpa de Vuelo parecía más relajado que de costumbre, tal vez por estar acostumbrado a esto. Juntos, el grupo se adentró en el bosque, siguiendo el rastro de presas frescas. A medida que avanzaban, los mentores compartían sus conocimientos sobre rastreo, emboscadas y tácticas de caza. Zarpa Blanca se sentía agradecida por la oportunidad de aprender de guerreros experimentados. Notó que su hermana, Zarpa Manchada, estaba especialmente atenta a las enseñanzas de Gran Tiniebla, su mentor y padre. Noche, por otro lado, intercambiaba miradas cómplices con Bigote Blanco mientras compartían estrategias de caza. De repente, un zorro apareció a lo lejos, interrumpiendo la tranquila jornada de caza. Los gatos se pusieron alerta, sus colas se erizaron y sus ojos se fijaron en la amenaza. Garra Rota fue el que se adelantó hacia al enemigo. El zorro solo lo observo y lo saludo con su cola anaranjada. 

_ "No se preocupen, es el viejo zorro." _ aviso a sus compañeros.

_ "¿El viejo zorro"? _ preguntó Nieve confundido y un poco alterado. 

_ "Es un zorro que vive en nuestro territorio hace un par de años. Jamás ataco a uno de los nuestros." _ respondió Bigote Blanco.

_ "Además el salvo a nuestro líder de un perro salvaje, nuestro agradecimiento fue que se quedara con nosotros y comiera nuestras presas, pero con moderación." _ explicó Alba Nevada.

_ "A cambio de protección." _ agregó Bigote Blanco. Alba Nevada solo asintió. 

El zorro desapareció en el bosque y los guerreros siguieron con su camino.  El aire estaba lleno de anticipación y emoción mientras avanzaban en silencio. Zarpa Blanca caminaba junto a Nieve, compartiendo miradas y sonrisas cómplices. A su lado, Zarpa Manchada intercambiaba bromas con Gran Tiniebla, creando un ambiente más relajado. A medida que avanzaban, Garra Rota tomó la palabra para dar algunas instrucciones.  _ "Recuerden, la coordinación es clave. Comuníquense entre ustedes, avisen si detectan presas, y trabajen juntos para atraparlas. La caza no solo es una habilidad individual, sino también un arte de colaboración". _

Los mentores lideraban el camino, señalando rastros y compartiendo su conocimiento con los aprendices. Zarpa Blanca observaba con atención cada movimiento de Garra Rota, absorbiendo cada consejo como una esponja. De repente, Noche se acercó a Zarpa Blanca con una sonrisa juguetona. _ "¿Lista para demostrar nuestras habilidades, hermanita?" _ preguntó con un brillo travieso en los ojos. Zarpa Blanca asintió, compartiendo la emoción de su hermana mayor. _ "Estoy lista. Vamos a mostrar de lo que somos capaces". 

La caza continuó, y el grupo se movía en armonía, cada aprendiz trabajando en conjunto con su mentor. Nieve y Zarpa Blanca formaron un equipo eficiente, coordinándose para acechar y atrapar a sus presas. Zarpa Manchada aprendió valiosas tácticas de caza de Gran Tiniebla, mientras Noche perfeccionaba sus habilidades con Bigote Blanco.