👑20🐉

23 6 2
                                    

El rey oscuro. 

Hace algunos años....

El nacimiento, símbolo de lo que para muchos es paz y fortuna, tan puro y mágico como solo la naturaleza del mismo puede llegar a ser, también oculta algo de maldad y destrucción para si mismo. La sangre que la madre derrama para que el o los seres que lleva dentro vean la luz puede ser considerado el ritual mas mágico y aterrador de todos. 

Los hijos de agua, especialmente aquellos de sangre real tenían la tradición de nacer en casa, en la comodidad de lo que era conocido como el cuarto de la luz. Un manantial de agua tibia donde al igual que un jacuzzi la madre era cobijada por el vapor y la tranquilidad que el agua daba a sus dolores. 

Luego de mas de 2 embarazos que resultaron en perdidas, el corazón de Idunna estaba cálido como las cuatro paredes que la rodeaban y los brazos que la arropaban. La reina al fin tendría el heredero deseado por todos, los antiguos chamanes, los sacerdotes e incluso los trolls habían asegurado aquella noche de luna llena muchos meses atrás que este parto seria el acertado; la energía que emanaba del vientre de la mujer embarazada indicaba justo lo que todos querían, La reina Idunna al fin estaba esperando al heredero de la marca de la sucesión. La marca que su esposo el actual rey no tenia. 

La magia era tanta y tan pesada como una bruma que ningún chaman, sacerdote o troll pudo decir con certeza si se trataba de una mujer o de un hombre el futuro heredero de Arendelle. Lo que fuera para Idunna estaba bien, para Agnar quien se tragaba sus deseos en voz baja deseaba que fuera un varón, siguiendo el linaje de hombres que había regido Arendelle por mas de 15 generaciones. No quería una mujer para tener al frente de sus tropas, quería un hombre para competir con el hijo varón de amanecer. 

15 horas de parto en total fueron el sufrimiento de una madre que se sujeto de los brazos de su esposo mientras la partera sostenía uno a uno los hijos de la corona. Así es. Hijos. Dos mellizos.

Elizabeth de Arendelle, nacida la noche del 21 de diciembre a las 23:50.
Elijah de Arendelle, nacido la madrugada del 22 de diciembre a las 00:50. 

Una hora exacta de diferencia entre ambos no era solo lo que hizo que el rey colérico saliera de la habitación dejando atrás a la inconsciente reina quien no pudo resistir mucho mas que el sostener apenas a sus hijos. 

Agnar colocó ambas manos con las palmas abiertas sobre la mesa que estaba justo frente a la puerta del salón de la luz, una hija. La heredera legitima de Arendelle, quien de los dos niños porto el signo del heredero era ella. La niña que nació primero. Eso no podía ser... Los trolls predijeron un hijo varón, los escritos admitieron que la guerra terminaría gracias a un hijo varón de la corona Arendelle. 

—¡Mierda! ¡Mierda, mierda!— el ego del padre que toda su vida fue renegado y odiado por no tener el símbolo de la pureza, golpeado porque este es portado por una mujer... Su propia hija. 

—Su majestad, la tradición dicta que usted debe bendecir con el agua del manantial a la heredera... Debe hacerlo antes de que nos la llevemos a los aposentos de su majestad la reina. — 

—Ya lo sé... — la partera se mostro sorprendida al verlo ignorarla para luego caminar en dirección a la salida. Sus labios, aunque indignados deseosos de decirle a ese hombre que se comportara como lo que era se sellaron al pensar en el castigo que aquel hombre le impondría. 

Y no se equivoco, una mañana mas tarde la partera fue enviada a casa con una orden in expresa del rey de no decir nada a cambio de su vida y unas cuantas tierras en el sur, la mujer acepto porque al final ella era solo una anciana con niños huérfanos a la espera de ella en el pueblo. 

Maestros Elementales. Tadelsa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora