Capítulo 8

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*Nick*

Todavía no me puedo creer la historia de Yulia, el cumpleaños, la mariposas, el niño.

Eso fue hace años, recuerdo que solo tenía ochos años y que era al cumpleaños de mi hermana, yo quería dar mi primer beso y cuando una niña preciosa, con su cabello rojo resaltante se me acercó vi la oportunidad perfecta.

Esa chica a la que besé y pensé que no volvería a volver a ver es Yulia. Desde que ella contó la historia algo en mi interior cambió, digo puede que les suene a que es una tontería, pero reencontrarte con tu primer amor pasajero me parece algo bonito.

Por mi cabeza pasaron diferentes ideas de decirle a Yulia, que ese niño de la miriposa de papel era yo, pero todas fueron descartadas.

–Nick?–la voz de Melissa por fin me saca de mis pensamientos, yo giro la cabeza hacia ella a lo que continúa–te e preguntado tres veces si vas a subir conmigo.

Estamos en el parqueo de su departamento, sentados en el coche de mi hermana que tomé prestado.

–No, estoy cansado–me limito a responderle secamente.

Pero Melissa no pareció captar mi intento de rechazo porque desde el asiento del copliloto, prácticamente se lanzó sobre mí y unió nuetros labios. Pero rápidamente yo puse mis manos en sus brazos y la alejé de mí para decirle:

–Enserio Melissa estoy cansado.

–Como quieras–respondió en tono brsvo y salió del coche dando un portazo.

Y pensando en mi pasado con Yul, fue conduciendo todo el trayecto a casa.

***

–Te pasa algo–mi hermana mas bien afirma que pregunta. Somos los únicos que estamos sentados en la pequeña mesa de la cocina desayunando–te noto raro desde el sábado.

–No es nada–me encojo de hombros–es solo que las pruebas finales ya está a la vuelta de la esquina.

Nicolle me mira poco convencida y justo en ese momento Yulia nos honra con su presencia.

–Buenos días–nos saluda nada más llegar a nosotros, no se sienta, solo toma una tostada en la mano y se dispone a hecharle mermelada.

–Yo le respondo el "buenos días" y mi hermana le habla.

–Hola bonita, debido a tus estudios y mi trabajo, no hemos tenido mucho tiempo para hablar. Te sientes cómoda aquí?

–Si, gracias estoy cómoda, y tranquila se que tienes mucho trabajo–le devuelve la sonrisa–y hablando de trabajo. Podrías decirle a mi hermana que empecé a trabajar y que empezaré a llegar mas tarde?

–Claro cariño, y suerte en tu primer día.

Prácticamente están pasando de .í mientras hablan.

–Bueno yo me tenfo que or, antes de que se me haga tarde–la pelirroja se prepara otra tostada, y se dispone a irce pero mi hermana le vuelve a hablar.

–Nick puede llevarte–me señala–tiene que pasar por tu instituto para llegar a la universidad.

Mi mirada y la de la pelirroja se encuentran y ahora soy yo quien habla:

–Pues calro, la llevaría con gusto si mi coche no estuviera roto.

–Que tiene tu coche?–Nicolle me mira. Y veo como de repente Yul se puso nerviosa.

–Una loca se encargó de destrozarlo.

Me hace mucha gracia ver la cara de vergüenza que pone Yulia cuando hace un par de noches antes se estaba autofelicitando en mi cara.

Todo comenzó con mariposasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora