4. Profecía

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- Un par de cientos de años???- repite Annette, en voz inesperadamente alta, haciendo que el resto se sobresalte. Toth frunce el ceño y suspira, molesto. Seraphiel se gira y la mira, amenazante
- Ejem. Como andaba diciendo - continúa el hombre-pájaro con su voz aguda - recuerdo haber escrito algo al respecto. Tu hermano no ha conseguido descifrarlo, pero...
Antes de que termine la frase, Seraphiel entrecierra los ojos con suspicacia, retrocediendo unos pasos, y despliega las alas, ocultando a Alucard de la vista.
- Lharagor od ècnahs' vèmám od acrozi, Seraphiel.
- Tabaori od noib arm, Miguel.
Musita la joven, claramente disgustada. Tras ellos aparece un ángel joven y fuerte, de piel blanca y ojos azules, ensortijado pelo rubio y rasgos delicados, con grandes alas blancas y armadura dorada.
- Veo que has traído... Amigos - comenta Miguel. Aunque su voz es suave y afeminada, todos captan la velada amenaza que se esconde tras sus palabras, como el siseo de una serpiente.
- Es el grupo que ha luchado contra Sekhmet. Si es su destino enfrentarse a ella, no seré yo quien lo impida.
El ángel dorado se coloca frente a su hermana, que agacha la cabeza ligeramente, pero le sostiene la mirada.
- Pero no hay sólo humanos ¿Me equivoco? - de nuevo, su voz suena a amenaza, mientras acaricia suavemente la empuñadura de su espada.
- Es Alucard, hermano, ya ha demostrado ser de fiar. No es un peligro para nosotros.
- Es una bestia, hermana. Ni siquiera es de sangre limpia, no es más que un mal engendro de vampiro.
Alucard frunce el ceño, pero Seraphiel lo mantiene aprisionado entre sus alas. La joven tiene los puños apretados, pero sigue manteniendo la cabeza gacha, aunque sus ojos destilan odio.
- Ya basta, hermano, no es necesario...
- Puedes intentar rebatirme, si lo deseas. Aunque puedo demostrarte que sigo siendo más poderoso que tú, no creo que quieras enfrentarme aquí - Miguel sonríe con aires de superioridad y se agacha hasta la altura del oído de su hermana- y no creo que a tus nuevos amigos les guste ver esa parte de ti ¿no crees?
- Miguel, Seraphiel, ya basta! - truena la voz de Uriel - Estáis en un lugar de estudio y meditación, no en una taberna!
Miguel se yergue y le dedica una última sonrisita a la joven, que le lanza una cara de asco y lo sigue con la mirada mientras se marcha, aún protegiendo a Alucard con sus alas negras.
Cuando al fin lo pierde de vista, Seraphiel repliega sus alas y suelta un grito de frustración.
- Maldito niño mimado- Uriel sonríe pacientemente.
- Es tu hermano mayor, Sera. Le debes respeto.
- Estoy harta de Su Angelicidad Ricitos de Oro - protesta, poniendo los ojos en blanco con un suspiro exasperado.
Uriel sonríe y le palmea la cabeza con gesto paternal.
- Pronto serás tan fuerte como él, ya lo verás.
Tras otro suspiro, la chica mira a Toth, que parece ofendido ante el enfrentamiento.
- Discúlpanos, Gran Escriba. Necesitamos saber qué es lo que escribiste, el tiempo apremia, y debemos derrotar a la Bestia antes de que haga más daño.
- Ejem, ejem. Sí, sí, claro. Como iba diciendo, hay un registro al respecto. Deseáis oírlo?
- Por favor, Gran Guardián. Exarp loncho od ethamz.
La mujer hace otra reverencia, mirando de reojo a su hermano, que vuelve a sonreír como un padre a su hija traviesa.
- El texto dice así: "En el momento donde lo terrenal y lo eterno se unan, se revelará a un ser alado un secreto que inunda. El eterno ancestral y su liberador, La Bestia y su traidor, un encuentro sin remedio en una batalla sumergida en el dolor. En el espejo del sentimiento ambivalente, se refleja tanto la pérdida como la redención del presente. Otro ser etéreo entre sombras, caos su artificio, ¿quién es aquél que teje engaños en este oscuro edificio? En el tapiz del destino y las almas entrelazadas, se esconde aquel que con ardides trama emboscadas. Tú que deseas el poder de quién el fuego esgrime ¿Puedes descifrar este enigma antes de que el último día termine?

El grupo se mira, sin entender. Uriel sonríe pacientemente y abre los brazos, invitándolos a seguirle.
- Tranquilos, tendréis tiempo para pensar en ello. Mientras tanto, hermana, Rafael está aquí, seguro que se alegra de verte.
- Adrian, siento mucho lo de Miguel, yo no...
- Tu hermano es un cretino - responde el dhampiro, con una sonrisa tranquilizadora.
- Y de los grandes - añade Annette.
- Se merece una buena paliza - comenta Richter, mientras el resto ríe.
Mizrak parece sorprendido por lo que ocurre a su alrededor.
- La verdad es que no sabía que un ángel pudiera ser tan...
- Impertinente? Rencoroso? Maleducado? Oh, sí, Miguel lo tiene todo. Pero también tiene más poder que yo y la Espada Llameante, así que... - el ángel de alas negras se encoge de hombros con gesto resignado.
- Pero tú eres mucho más inteligente y mucho más rápida que él, hermana - Uriel le palmea la cabeza de nuevo.
- Bueno, no es difícil ser más inteligente que él, hermano...

* Lharagor od ècnahs' vèmám od acrozi- me alegro de verte de nuevo.
* Tabaori od noib arm= Ojalá pudiera decir lo mismo.
* Exarp loncho od ethamz = El conocimiento y la sabiduría son poder.

Miguel: https://i.pinimg.com/originals/6f/1a/8a/6f1a8af753017c5542170ba6172387d0.jpg

La Revolución de la noche eternaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora