Ansiedad (Romione)

Capitulo 5

-¡Maldita sea, hace demasiado calor ahí afuera!-Dijo Ron, siguiendo a Hermione a la cocina.

-Ron, de verdad. ¿Tienes que jurar?-Hermione le siseó a Ron, sin darse la vuelta.

-Er... Hermione, somos sólo nosotros. ¡Además, si tuvieras mi piel pálida estarías jurando!-Ron siseó a su espalda.

Hermione se giró para regañarlo más, pero se le quedó el aliento en la garganta. Ron estaba usando el dobladillo de su camiseta de Chudley Cannons para limpiarse el sudor de la frente, dejando al descubierto su abdomen y la mitad de su pecho. Hermione se lamió los labios mientras sus ojos recorrían las pecas salpicadas por la sudorosa parte superior de su cuerpo conectando los puntos hasta llegar a su abdomen. Luego notó la cintura de sus pantalones asomando por debajo de sus pantalones colgando hasta la cintura. Parpadeó lentamente y su mente comenzó a nublarse por el deseo cuando de repente su vista fue obstruida por algo ofensivamente naranja. Sus ojos se dirigieron al rostro de Ron y lo encontró mirándola con una sonrisa de complicidad. Se había bajado la camisa y se había pasado las manos por el cabello empapado con ambas manos, haciéndolo caer sobre su cabeza en ángulos extraños en enredos mojados. Sus mejillas estaban rojas por el calor y ella pensó que nunca se había visto más atractivo.

Oh, ¿por qué tiene que verse tan hermoso al mismo tiempo que estoy a punto de gritarle? Debe tener algún tipo de radar. Hermione está molesta... déjame mostrar una parte de mi cuerpo y darle una sonrisa para derretir sus entrañas y totalmente... oh, no importa. Todavía estás molesto, ¿recuerdas?

Ella se compuso y le puso los ojos en blanco esperando parecer más irritada de lo que realmente estaba.

-Oh, sabes lo que siento cuando dices malas palabras, especialmente cuando hay tanta gente alrededor.-dijo. Hermione murmuró, no muy interesada en la conferencia como lo estaba hace un momento.

Se dio la vuelta de nuevo y comenzó a buscar en los armarios de la cocina de Burrow. Sabía que había venido aquí por una razón y ahora, por su vida, no podía recordar qué era ese algo.

Se agachó para rebuscar en un gabinete inferior con la esperanza de que algo despertara su memoria. Ron tuvo este efecto en ella y todavía estaba decidiendo si eso era bueno o malo. Revisó una montaña de ollas y sartenes, haciendo que se derramaran por el suelo. Ella se encogió ante la cantidad de ruido que hizo y se levantó rápidamente frustrada. Ron caminó hacia ella rápidamente usando su varita para enviarlos de regreso al interior ordenadamente y cerrando la puerta.

-Está bien, Hermione, solo son ollas. No ha pasado ningún daño... ¿Estás bien?-Ron puso una mano en su brazo, mirándola con gran preocupación.

Hermione lo miró confundida. Entonces se dio cuenta de lo que él debió haber pensado y se molestó genuinamente.

-¡Lo sé eso! -exclamó Hermione. Ella apartó su mano y se cruzó de brazos.-¿Qué pensaste? ¿Iba a perder la cabeza porque unas ollas y sartenes se cayeron al suelo? Por el amor de Dios, Ron. ¡Dame algo de crédito!

-No, por supuesto que no. Es sólo que con el ruido y ahora estabas muy molesta y...-Ron suspiró y se acercó an ella nuevamente y pasó sus manos arriba y abajo por sus brazos.-Mira, lo siento. Lo estoy intentando, ¿vale? Sólo estoy tratando de ayudar.-dijo en voz baja y besó su frente.

Ella suspiró ante su toque y cerró los ojos cuando sus labios encontraron su rostro. Sabía que él estaba haciendo todo lo posible por ser paciente con ella y, si era honesta consigo misma, no se lo estaba poniendo fácil.

A medida que septiembre se acercaba, se sentía cada vez más nerviosa por su decisión de regresar a Hogwarts sabiendo que Ron y Harry no se unirían a ella. Lógicamente sabía que esto era algo que tenía que hacer. No pudo obtener crédito conscientemente por un año que nunca completó. También entendió por qué Ron y Harry eligieron tomar sus EXTASIS en diciembre, pero eso fue solo porque sabían lo que querían hacer en sus carreras. Hermione todavía estaba indecisa y esperaba que un año de educación la ayudara a tomar esa decisión.