Capítulo 4
Siempre he querido saber el por qué papá me odia tanto, el por qué él no me ves como su hija, el por que me trata con tanto desprecio sin disimularlos. Mientras que yo hago todo lo que pueda con tal de que papá me vea como su hija, a pesar de ser tan gruñón conmigo e indiferente siempre trato de que papá me vea como lo que soy, pero al parecer jamás dejará de verme de la manera de la que me ves, no hasta que Dios obre en su corazón y lo cambie.
Recuerdo cuando cumplí mis quince años pensé que papá me iba a dar un regalo enorme, que me iba a sonreír y me iba a dar un beso, y mientras me abrazara me felicitaría y me dijera lo mucho que me amaba, ese día, ese día jamás lo olvidare, jamás olvidare lo que papá me susurró cuando me abrazo ese día "Eres y siempre será un estorbo para mi" "Viniste a este mundo a arruinar mi familia, Jamás, Jamás te veré como mi hija, porque me robaste lo que más quería en este mundo" no entendía el porqué papá me susurraba aquello, ¿Que le robe a papá? ¿Por que me dice estas cosas? Ese día tuve la peor recaída de mi vida, la pasé sola, mamá no sabía todo el daño que papá me estaba causando, día tras día papá me insultaba y me decía lo difícil que ha sido su vida después que llegue a la familia. Papá aún me sigue odiando a pesar de regalarme un mono, seguro que me regalo un mono porque me ves como tal. Quiero que papá me quiera, quiero que papá me ame y me mire como mira a mis hermanos.
13 de noviembre, iba de camino a casa de Jetson a reencontrarme con mi amado, después de un largo tiempo por fin nos íbamos a reencontrar, llevaba en mi manos una libreta y un bolígrafo, sentía que debía de regalarle algo, y no hay otro regalo mejor que esté para mi escritor, soy pesimista en todo y cuando se trata de regalar ahí soy el doble de pesimista, no fue un buen día en casa, pero a pesar de todo quería mostrarle una hermosa sonrisa a mi amado, mi bendición.
Cuando llegue a casa de Jetson estaba desoladas y el ambiente estaba un poco tenso, él estaba sentado en una mecedora al frente de su casa, su rostro estaba decaído, no sonreía, no sonrió al verme como siempre solía hacerlo, en esta ocasión sentí una horrible mirada, me miraba de una manera prepotente y con ira, como si mi presencia le incomodaba o como si ya no quisiera verme más en su vida. Me acerqué a él con alegría, él se levantó y nos abrazamos brevemente, tome asiento a su lado en la otra mecedora.
— Mira — le muestro el regalo que le compré con alegría, él se queda inmune.
— ¿Y eso? — pregunta con frialdad.
— Es una libreta, no encontraba que regalarte, así que opté en regalarte una libreta y un bolígrafo, para que escriba en ella cuando sienta hacerlo — sigo hablando emocionada, observaba la libre marrón de una manera extraña junto al bolígrafo color aluminio.
— ¿En serio? — habla decepcionado, sigo sin dejar de sonreírme.
— ¿Como estuvo tu viaje? — trato de cambiar de tema, no le gusto mi regalo, ya sabía que no le gustaría.
— No quería venir — habla con sinceridad — no tenía deseo de verte — me decepcionó al escuchar ¿Que le ocurre? Jetson jamás me hablaría de esa manera.
— ¿Que? — preguntó con sorpresa.
— Ya no quiero seguir fingiendo Ava...
— No entiendo.
— Nunca te he querido, todo ha sido una falsa, no estoy enamorado de ti ¿De verdad piensa que una persona como yo se iba a enamorar de alguien como tú? — me señala y sonríe de burla.
— No me haga esto Jetson ¿Que es lo que dice? — la frustración ilumina mi rostros.
— Lo que escucha ¡De por Dios! ¿Está sorda? No me gusta, si hice lo que hice fue para que te sintiera mejor y para que mejore tu estado de vida — respira — no entiendo, como es que no entiende — habla enojado — no quiero verte nunca mas en mi vida, tu presencia me estorba, no puedo tan siguiera verte a la cara, negra, fea, jamás me enamoraría de una persona tan insignificante como tú ¡De por Dios! Como fuiste capaz de creer o de pensar que tú sería mi amada, Dios me tienes algo mejor, algo mejor que tú.
— Me está rompiendo en mil pedazo, sabe que me gusta de una manera inexplicable no puede hacerme esto ahora — hablo entre lágrimas.
— ¡Ja! Que débil eres, debí de dejarte allí aquel día, jamás debí de ser un buen samaritano. No acepto tus sentimientos hacia a mi, jamás lo aceptaré, mírate.
— Jetson por favor, no me haga esto, nos íbamos a casar qué significa esto — le enseño el anillo de compromiso.
— Estaba cegado, solo quite la venda que tapaban mis ojos, tú no eres para mi, yo no soy para ti, listo — se levante de la mecedora — puede retirarte.
— Jetson por favor, está siendo muy cruel conmigo ¿Que te pasa? Tú jamás me ha tratado de esta manera.
— ¿Es que no entiende? Soy toda una celebridad, no puedo salir con alguien como tú, tú no me agrada ni un chin.
— ¿Nunca me ha querido?
— Nunca te he querido, nunca he sentido nada por vos, he tratado de hacerlo, he tratado de amarte, pero lamentablemente no lo he logrado, lo siento mucho — entra a su casa y me deja ahí para entre lágrimas con mi corazón roto en mil pedazo, mis piernas flojean y caigo al suelo entres lágrimas, tiro con mala gana la libreta y el bolígrafo al suelo, esto no puede estar pasándome, no ahora.
Mamá vuelve por favor.
Mamá por que te moriste.
Mamá te necesito.
Mamá por favor, mamá necesito de tu consuelo.
Mamá...
Mamá ya no estaba.
Jetson ya no estaba.Mis hermanos ya no estaban.
Me encontraba sola en medio de esta oscuridad, sentía como la arena movediza me hundía más y más... me sentía más sola y más rota, todo se fueron y me abandonaron, ya no tenía el apoyo de nadie, ya no quería seguir, quería marcharme como todo lo hubieran hecho, quería irme de igual forma. Pero aún no es el momento, debo de levantarme y enfrentar los problemas con la frente en alto.
¿Donde están todo?
¿Por que me han dejado sola?
¿Por que me dejaron sola?
Poco a poco todo se fue tornando oscuros.
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Siempre he sido bonita. #3
Teen FictionTercer libro de la trilogía "Bonita", espero le guste mucho. En este libro estarán leyendo una nueva etapa de la protagonista, una mente renovada y un corazón sano, Dios siempre hace lo que le place y lo hace a su manera, Dios se ha glorificado en l...