Otra Habilidad

239 16 4
                                    

Astrid podía sentir el calor de la mirada de Hipo desde el otro lado de la habitación provocando una profunda ansia en su piel, Hipo se acerca a ella como un dragón que persigue a su presa, su rostro no muestra ninguna emoción. , ella por cada paso que el da hacia ella la vikinga se alejaba, Astrid se echa hacia atrás hasta que su espalda toca la pared, ahora estaba acorralada, Hipo se va acercando mucho hasta que su cuerpo la presiona contra la pared, la furia se filtra por sus poros pone la mano en su húmeda entrepierna

Astrid: solo tu puedes volverme así de loca babe 

Astrid comienza a retorcerse bajo su tacto girando las caderas contra la palma de su mano buscando mas contacto pero la mano de Hipo sigue sin moverse.

Hipo: te juro que no volverás a a atreverte a pensar en nadie más

Su voz era dura y llena de promesas, hay un deseo desenfrenado en sus ojos, pero también Astrid nota algo más en ellos, un mar profundo de emociones.

Hipo: mi amor, estas tan mojada

Las manos de su amada buscan desesperadas su pecho pero el las agarra y las pone sobre su cabeza.

Hipo (bromeando): ahora soy tu esposo, yo doy las órdenes ahora preciosa (la besa) mantén las manos quietas

Astrid (siguiendo la corriente): si mi señor

Hipo: buena chica

Sus labios formaron una sonrisa traviesa, sus manos se deslizan hacia abajo lentamente desde sus manos por el pecho de Astrid, sus dedos vuelven a encontrar su centro y buscan su punto más sensible, Hipo la masturba haciendo círculos alternando la velocidad y presión de sus labios. se escapan fuertes gemidos

Astrid: mmm, que rico se siente

Hipo: ¿quieres algo dentro de ti cariño?

Astrid: si, por favor.

2 dedos se meten con fuerza dentro de ella provocando que ella eche la cabeza hacia atrás y comience a gritar, los dedos de Hipo comienzan a moverse dentro y fuera mientras su pulgar sigue haciendo círculos alrededor de su clítoris.

Astrid: si, así mi amor

Hipo: te gusta preciosa

Astrid: si, no te detengas, casi llego

Hipo la penetra mas profundamente y acelera el ritmo, sus dedos giran y empujan profundamente cuando llegan adentro del todo con incesante y firme presión, un par de penetraciones mas y olas de placer se apoderan de ella, su interior palpita y se cierra mientras Astrid se recupera, su cuerpo se queda sin fuerzas y sus brazos se agarran su cuello como apoyo, ella cierra los ojos cuando saca la mano lentamente dejándola sobre su cintura, su otra mano cubre su mejilla y la acaricia con ternura.

Hipo: estas bien cariño

Astrid: mas que bien

Hipo planta un tierno beso en sus labios, el Caballero la levanta en sus brazos provocando que suelte un gemido mientras el la lleva hasta la habitación, en cuanto cruzan la puerta del cuarto Hipo la besa con mucha ternura

Hipo: desnúdate para mi

Su tono de voz hace que el cuerpo de Astrid duela de calor, se quita la ropa pieza por pieza tarándola al suelo y quedando completamente desnuda pero para molestarlo le arrojo sus bragas a la cara

Hipo: muy graciosa, a la cama, ahora

Astrid se recuesta en la cama y deja que la suave almohada aguante su cuerpo esperando lo que estaba por venir, Hipo camina hacia un lado de la cama y observa todo su cuerpo

El Caballero NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora