13

952 147 19
                                    

SUPONGO...

Antes de iniciar, las partes que se encuentren en cursiva serán recuerdos.

Antes de iniciar, las partes que se encuentren en cursiva serán recuerdos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— No Katsuki, estás confundido... No lo extrañas a él, extrañas lo que era... Quién era.

Aizawa trata de comprender a su alumno, trata de ayudarlo, realmente lo intenta, pero todo se volvió tan complicado.

Si antes se sentía inútil, ahora el sentimiento se había duplicado. ¿Cómo pudo permitir que sus alumnos fueran dañados de esa forma?

¿Cómo pudo ser tan débil?

Katsuki mira por la ventana, hechizado por el atardecer que se muestra, tan rojo, tan lindo.

— Supongo que lo extraño... aunque realmente no se ha ido.

— Katsuki...

— Intenté abrazarlo, pero realmente no duró mucho... — un suspiro sale de sus labios, seguido de un ceño fruncido.

— Sabía que cometía un error al dejarte lidiar con Izuku en su estado, te está afectando y tu-

Antes de que pudiera seguir hablando, Katsuki soltó una fuerta explosión, completamente perdido. No quería oír esas palabras, no quería aceptar que lidiar con Izuku lo estaba matando lentamente.

Se negaba a aceptar aquello, porque hacerlo, sería aceptar que Izuku jamás sanaría y quedaría así.

Cómo un rompecabezas al que solo le falta una pieza.

Se negaba a aceptar que quizás Izuku no tenía solución.

Sale del lugar sin querer oír a su maestro un segundo más, caminando en automático, ni siquiera se inmuta cuando en un punto se detiene y se encuentra parado frente a la habitación del pecoso.

"Solo una vez más" — repite en su cabeza como un bucle, incapaz de detener ese pensamiento que sale cada vez que se encuentra parado frente a esa habitación.

"Solo una vez más" — repite en su cabeza como un bucle, incapaz de detener ese pensamiento que sale cada vez que se encuentra parado frente a esa habitación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Izuku mira el cielo, cautivado por las estrellas, por su brillo y la cantidad de estas. Hay algo en ellas que llama su atención, que cautiva su ser.

Sin poder evitarlo, su mirada se desvía a un lado, viendo de reojo al rubio que lee un libro sobre un hombre que se siente como un insecto, insignificante, inútil, asqueroso.

No entiende porque, pero cuando lo mira siente lo mismo que cuando ve las estrellas o los atardeceres, hay algo en ese rubio que lo cautiva y no puede evitar mirarlo.

— Por favor, vete... — susurra, abrumado por esa sentimiento que se instala en su pecho cada que lo ve. No quiere sentirse así, lo abruma, lo confunde.

Lo asusta.

Katsuki deja de leer de golpe, desconcertado — ¿Que ocurre, Izuku? — pregunta, dejando a un lado el libro.

— Estoy cansado de escucharte — miente, pues en el fondo, escuchar al rubio es una de las pocas cosas que hacen de su día mejor.

La mirada rojiza se desvía, viendo el cielo estrellado, una risa nerviosa escapa de sus labios, abrumado ante esas palabras.

— No digas eso... No digas eso... — murmura, levantándose para ir a acomodar la cama, pues ya es hora de dormir y de seguro Izuku se sentía cansado y por eso le dijo eso.

Katsuki acomoda la cama con una sonrisa, una sonrisa temblorosa y ojos cristalizados que desconcierta aún más al pecoso. Se para de golpe, con un fuerte punzón en su cabeza que lo marea, no quiere verlo así, pero no sabe porque.

"— ¡Dile la verdad a Katsuki! Aún estás a tiempo, Izuku, todo puede pasar en esta guerra, si algo llegará a pasar... Te arrepentirás toda tu vida... — una castaña de mejillas rojizas le grita, con sus manos cerradas en puños que amenazan con golpearlo.

Pequeñas lágrimas recorren sus mejillas, mirando el suelo con impotencia.

— ¿Decirle la verdad? — repite, con una sonrisa triste y mirada perdida hacia un atardecer resplandeciente. — ¿Decirle la verdad para que observé las estrellas  entre lágrimas, en lugar de seguir a la estrella que guía su destino?  — las lágrimas no tardan en caer, haciendo sollozar con más fuerza a la castaña que solo busca ayudar a su amigo.  —No, no... Déjalo que piense que jamás lo amé.

— No, Izuku, por favor escucha a tu corazón, siente como late por él...

El pecoso niega, sonriendo al recordar esa bella mirada, mirada que no le pertenece.

— Cuando deje de latir, mis últimas palabras serán..."

— Te amo, Katsuki...

El rubio deja de acomodar la cama al escuchar aquellas palabras, con las lágrimas que estuvo tratando de contener brotando por montones.

Todo era tan injusto y doloroso.

¿Porqué Izuku no pudo ser sincero desde un principio?

¿Porqué el no pudo ser sincero con sus sentimientos desde un principio? Porque tuvo que esperar a ver a Izuku de esa forma para aceptar su inútil y tonto amor.

¿Porqué ninguno de los dos pudo ser sincero?

¿Porqué ninguno de los dos pudo ser sincero?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Volví y con ganas de sufrir.

Oooh amistades, use un audio que me tiene enviciada para algunas partes de la historia, también algo de TV girl, leves referencias.

Es solo que queda tan bien con ellos, en fin, los amo

Pero bueno, esto solo es la calma antes de la tormenta.

Ojalá y sean felices al final akfvakbs

YES TO HEAVENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora