Parte 3: La reunión

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Estaba confundida no entendía a lo que se refería pero no tuvo tiempo de preguntar por que el se subió a su carruaje y se marcho, así que decidió emprender camino hacia su hogar en cuanto llego vio el mismo carruaje estacionado, no entendía nada asi que corrí lo mas que pude hasta mi cuarto y cuando al fin llegue vi a mi madre parada en la ventana, tenia el cabello amarrado en un moño y una pillama, trague en seco en cuanto vi como se volteo y vi decepción ira y nerviosismo.

Ella se me hacer co y estaba a punto de disculparme por irme pero ella hablo primero y lo que dijo me desconcertó.

- te están esperando en la sala de reuniones límpiate la cara y ponte maquillaje  tu corona luego hablaremos de lo que hiciste.-sin mas se fue pero no me quede quieta hice todo lo que me pidió,y ya estaba en frente de la gran puerta blanca de madera en donde se aria la reunión, dos guardias la abrieron pero no eran solo dos guardias de siempre si no que eran una fila de guardias.

De un lado un montón de nuestros guardias y de otro de guardias ¿Locrott? Entro y la gran mesa era ocupado por sus padres, y del otro lado era un hombre de tercera edad bajito y sin cabello, y del otro lado era una mujer tenia el cabello corto rubio y un vestido blanco y en el centro estaba.... El era el, el chico de hace unas horas pero que carajos estaba pasando, me senté en el medio de mis padres justamente al frente del susodicho.

-Cuanto quieres por el acuerdo de paz?-dijo mi padre y hay si fue verdad que no entendí nada, iban a firmar un acuerdo con los Locrott, wow jamás creí que fuera tan fácil.

-Pido las tierras que tienes en el sur y si me las das te firmare ese acuerdito de paz que tanto pides-dijo el rey con burla en su voz y una sonrisa que daba miedo pero era linda muy linda sus dientes eran perfectos el era perfecto. Su padre la mataría sino estuviera leyendo su mente.

-No puedo darte esas tierras son importantes para mi nación, es hay en donde los frutos son cosechados y almacenados es mi tierra más fértil, pide otra cosa.

-Mnnh, entonces creo que no hay trato, perdonen.

-Que!- mi madre abrió los ojos de par en par sorprendida por las palabras del susodicho-Para que las quieres? Ya tienes muchas tierras no necesitas mas.

-haber señora yo acepto lo que a mi se me de la gana, y ya dije que no voy a firmar un acuerdo de paz, para lo único que me he molestado en venir hasta esta posilga de pueblo es por esas tierras, no para verle la cara a su amargado esposo, si no me dan lo que quiero n o hay trato asi de simple.

Estaba muda, nunca antes alguien se refería a mi padre de esa manera ni siquiera mi madre y "posilga" así el veía a nuestro pueblo, eso era una total falta de respeto, pero decidí no decir nada para no empeorar mas la situación.

El rey ¿Cardan? Salió de la sala con una sonrisa en su rostro y con sus dos acompañantes y sus miles de guardias que le protegían la espalda y el frente en todo momento, el ambiente empeoro y no me quede a que se calmara asi que mientras mis padres discutían yo me fui a mi habitación tratando de pensar en todo lo que había sucedió.

El no acepto el tratado de paz lo que significaba una palabra...guerra

Pero que podía yo hacer para evitar que esto sucediera?

El reino enemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora