♡7. Vɪᴄɪᴏᴜs Lᴏᴠᴇ

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Can't help but to glance
From the corner of my resentful eyes
Guess it's all perspective, but
It's you I never get enough
We're always far apart
We've got a vicious love
We mix our tears with blood

Can't help but to glanceFrom the corner of my resentful eyesGuess it's all perspective, butIt's you I never get enoughWe're always far apartWe've got a vicious loveWe mix our tears with blood

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CAPÍTULO SIETE

Salir de casi 48 horas de guardia era sencillamente el placer más grande que puedes imaginarte en esta vida.

Se había acabado, al menos por esta semana, las dormideras incómodas de 20 minutos en un rincón del suelo bajo el escritorio de la sala de emergencias. Estaba hasta la puta madre de hambrienta y lo único que tenía mi pobre estómago eran 5 paquetes de galletas saladas que no hacían nada de peso para calmar los ruidos de mi pesar, además cómo complemento mi espalda dolía a montones y el morral que cargaba con todas mis cosas no era precisamente un buen analgésico.

Tenía mucho sueño, mis ojos no aguantaban más el estar en funcionamiento y constantemente me dormía por segundos mientras caminaba, cosa que generaba que tropezara con muchas cosas.

Le había pedido a Mandy el favor de que pasase por mi tras la guardia, ella aceptó gustosa pese a tener ciertos malestares por su condición de salud; su risa al finalizar la llamada me hizo sospechar de sus intenciones.

Le creí pese a esto.

Grave error.

Al salir por la entrada de emergencias mientras revisaba mi teléfono pude percibir un nauseabundo olor a cigarro proveniente del estacionamiento ubicado a un costado del hospital. Acción que, por estos alrededores estaba terminantemente prohibido por razones que puedes imaginar con facilidad. Me convencí de que debía detener eso pese a mis vagas ganas de movilizarme y me auto preparé psicológicamente para regañar a la desconsiderada persona que se había atrevido a practicar tal cosa aquí.

¿Mi sorpresa? Era nada más y nada menos que el idiota anarquista Hobie.

Consejo mental número 500: No confiar en las risas de Mandy.

Estaba sentado muy tranquilamente sobre el capó del Mitsubishi calando de su cigarro con la intención de acabarlo para prender otro que traía en la pequeña caja que sujetaba en su otra mano, sus ojos estaban cerrados permaneciendo totalmente alejado de este mundo. Yo únicamente pude observarle por un pequeño periodo de tiempo detallando su vestimenta además de su físico, el tratamiento y la dieta que la doctora le había indicado comenzaba a surtir efecto.

Su físico estaba mejorando de manera asombrosa, estaba recobrando masa muscular al mismo tiempo que le tonificaba gracias a una rutina de ejercicios detallada dándole un aspecto de modelo punk.... Me mordí el labio de manera inconsciente mientras mis ojos solo podían cerrarse y reproducir aquello que mi mente empezó a maquinar de forma no apta para menores de 18.

//🕸♡ 𝐒𝐩𝐮𝐧𝐠𝐞𝐧 [Hᴏʙɪᴇ Bʀᴏᴡɴ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora