LAURA Y SUS ALOCADAS AVENTURAS

LA LLEGADA DE MARÍA

Era miércoles por la mañana mientras me despertaba con el acompañamiento de la alarma del teléfono, era las 8 de la mañana y apenas había dormido algunas horas, vi el teléfono y tenía un mensaje de mi amiga maría,

MeryLove: -¡Buenos días, dormilona!, dentro de 45 minutos estoy llegando a la parada ;)-.

María estaba a punto de llegar, por lo que me desperté rápidamente y me fui a lavar la cara para espabilarme un poco, aun tenía sueño y poco de dolor de cabeza, pero me tomaría unas pastillas en el desayuno, baje a la cocina para hacerme un café y una tostada, mientras desayunaba miraba como boba el amanecer, era muy bonito y hacía un poco de frio.

Mientras desayunaba note como mi pañal empezó a mojarse, - ¡opps! -, parece que alguien se ha hecho pipí encima, me dije con una risita-.

-tendré que cambiarme antes de recoger a mi amiga-.

Cuando terminé el desayuno, fui al cuarto de baño para quitarme el pañal y limpiarme bien la zona, después puse el pañal sucio para tirarlo cuando fuera a la estación, quería ponerme un pañal pero iba a recoger a mi amiga y no quiera que me vea así, una chica de 22 años usando pañales, que vergonzoso sería, por lo que me vestí y me puse unas bragas, un pantalón vaquero, la sudadera blanca y las zapatillas, cogí todo lo necesario y fui camino a la estación, antes de salir me asegure de guardar todas las pruebas de pañales que no se vieran, guarde el paquete al fondo del armario cubriéndola con una toalla, una vez salí tire el pañal en el contendor de camino a la estación, apenas quedaban 10 minutos para que llegara pero como vivo en una zona muy buena la estación estaba justo a 10 minutos de mi casa por lo que llegaría justo a tiempo, cuando llegue, vi que aun no había llegado y que apenas había gente allí, mientras esperaba me hice un cigarro. Al cabo de un rato vi que llegaba un autobús por lo que ya había llegado María, estaba muy emocionada por que iba a ser el primer verano que pasaríamos juntas, corrí hacia María para darle un gran abrazo y nos abrazamos las dos muy fuertes, estábamos emocionadas de vernos y poder pasar el verano juntas.

María: - que emoción tía, ¿Cómo te han ido estos días? -

Yo: -Bien, bien, un poco sola, pero he estado haciendo muchas cosas-. Dije un poco sonrojada, de hecho, María notó que me puse un poco colorada, pero no le dimos más importancia-.

María: -bueno pues cuéntame mientras vamos de camino a casa-.

Estuve contándole a mi amiga todas las cosas que he estado haciendo durante estos días, de las excursiones a diferentes playas sola o con mi madre, y muchas más cosas menos lo de los pañales ya que no quería que pensara nada raro de mi o lo que fuera, se que era mi mejor amiga, pero aún no estaba tan preparada para contárselo, tenía miedo. Cuando llegamos a casa, acompañe a María a mi cuarto para que dejara la maleta y pudiera acomodar su ropa.

María: - ¡oh!, que casa más bonita lau, es preciosa-.

Yo: - jejeje, ¡gracias! -.

María: -Oye, donde está el baño, que después de 2 horas de viaje en autobús sin paradas estoy que me meo encima-.

Yo: - ¡oh!, si, arriba subiendo las escaleras la primera puerta-.

Yo: -déjame la maleta y te la subo a mi cuarto mientras-.

María: -está bien, ¿puedes tú sola?, pesa un poco-.

Yo: -Sisi, corre tu al baño antes de que tengas un accidente, jejej.-

Mientras María subía corriendo las escaleras dirección al baño, yo cogí la maleta y vaya que, si pesaba, tanta ropa que parecía que llevaba a alguien dentro. Entre a la habitación y deje la maleta a un lado, mientras María estaba en el baño aproveche para echar un vistazo rápido, por si había indicios de pañales o cualquier cosa que no quisiera que viera, abrí el armario y el paquete de pañales estaba bien tapado, por lo que me alivié.