⌗ 𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟭𝟯

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Soobin deslizó un dedo por el cristal de la mesa de exposición mientras el parecía pensar qué decir

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Soobin deslizó un dedo por el cristal de la mesa de exposición mientras el parecía pensar qué decir. No era el único que estaba nervioso. El llevaba casi dos años esperando ese momento, buscando al misterioso joven con el que se había casado durante un fin de semana de fiesta. No esperaba encontrará se a alguien así. Apenas recordaba al castaño con el que se emborrachó, pero los pocos detalles que había memorizado no tenían nada que ver con el joven Omega dulce e inofensivo que tenía delante.

El pelo castaño le llegaba un poco bajo las orejas. Tenía un cuerpo menudo y delgado. Y sus ojos eran de un increíble color azul y estaban repletos de luz, de vida. El se obligó a tranquilizarse cuando vislumbró en esos mismo ojos un atisbo de temor.

─ No voy a hacerte daño. Solo quiero entenderlo. Y conseguir el divorcio, claro.

Yeonjun le sostuvo la mirada unos instantes, sopesando si era de fiar o si, por el contrario, podía resultar peligroso.

─ Tenía que casarme con alguien ─ confeso finalmente apenas en un susurro inaudible ─. Antes de morir, mi padre puso una cláusula de su testamento para que no pudiese acceder a su herencia a menos que contrajese matrimonio. No era la gran cosa, pero necesitaba el dinero para poder abrir la reposteria ─ hizo una pausa tras hablar atropelladamente ─. Así que mis amigos me regalaron un boleto de avión con destino a Las Vegas con la intención de que consiguiera encontrar un marido. . . El resto de la historia, en fin, creo que sabes como término todo.

─ ¿Estas bromeando conmigo? ¿Tengo cara de imbécil?

─ Es la verdad.

Soobin comenzo a caminar de un lado al otro de la tienda y se llevó las manos al puente de la nariz. Aquello no tenía ningún sentido y no era lo que esperaba averiguar al ir hasta allí, conduciendo durante más horas seguidas de lo aconsejable. Soobin se sentía perdido, muy perdido. Hacia tiempo que lo acompañaba la sensación de no encontrar su lugar en el mundo, de no tener nada útil que hacer con su vida;  el hecho de desenmascarar a su misterioso esposo se había convertido en una especie de obsesión durante el último año nuevo medio por que, de algún modo retorcido, era lo único interesante que había trastocado el curso de sus dias. Así que, cuando  su abogado le aseguró que había conseguido una dirección de un establecimiento comercial a su nombre, no dudo en poner rumbo hacia allí porque, ¿total?, tampoco tenía nada mejor que hacer.

─ Di algo. Cualquier cosa. . .

Soobin tardo unos minutos en contestar.

─ Quiero el divorcio. Mañana. Sin excusas. Pasaré a recogerte a primera hora.

─ Pero. . . ¡no! ¡No puedo! Por favor. . .

⊹   𝟵  𝗮𝗻𝘁𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝘁𝗶   ★    ─ 🍂 ⌗  [Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora