─ ¿Como que ya veremos?─ Si, ahora necesito dormir un rato.
─ Entonces ¿eso significa que no vamos a divorciarnos?
Soobin se quedó inmóvil en ese momento, tirándose unos instantes en silencio. Estaba comportándose como un idiota. Otra vez. Realmente era la única forma de comportarse que el conocía. ¿Que pretendía hacer? El no estaba seguro. Lo único era que sabía a ciencia cierta que no quería volver a Seúl y que, al salir de su casa con la excusa de que buscaría a su esposo misterioso, habia hecho una maleta más grande de lo que debía. Por si acaso ¿por si acaso que? Ni idea.
Al principio había pensado en recorrer la costa punta a punta, parado en albergues sin y obligaciones ni horarios, sin nada del que preocuparse. Al fin y al cabo, ya no tenía trabajo, tampoco preocupaciones ni responsabilidades. Su existencia era un lienzo en blanco, sin pasado, presente ni futuro. Soobin esperaba que al cumplir 25 se sentiría satisfecho al mirar atrás y recordar todos los logros que hubiera acumulado.
Nada lejos de la realidad. Se sentía vacío, y alcanzar aquella cifra y el hecho de saber cómo las personas seguían adelante, tan sólo había acentuado su desesperación.
Así que llevaba algunos meses cometiendo un par de locuras. Cualquier cosa que se le pasará por la cabeza con tal de sentirse vivo. Se había tirado en paracaídas, se había emborrachado y bebido más de lo debido, haciendo todo lo que le apetecía y cuando le apetecía. ¿Cual fue el resultado? Seguir sintiéndose igual. Le faltaba algo, pero el problema era que no sabía que era. Lo único por lo cual se había Estado esforzando por años se quedó muy lejos de su alcance y paso a ser un sueño frustrado que detestaba recordar.
Y ahora se encontraba ahí, en un pueblo anclado en el pasado que no tenía nada que ver con su forma de vida, frente a un Omega que despertaba en él cierta compasión. Eso no era bueno. Por favor..., ¡si ni siquiera conseguirá conectarse a Internet con el teléfono!
Pero aún así...aun así aquello era tan diferente, completamente nuevo y curioso. Esos objetivos pasarían a la historia en poco tiempo, mientras tanto...
─ Tal vez, simplemente me quedé por aquí.
─ ¿Aqui en el pueblo?
─ No, en un mundo de purpurina con caritas felices flotando por doquier ─ dijo malhumorado ─. ¡Pues claro que sí! Y para eso necesitaré un lugar donde quedarme estos días. Es decir me quedaré en tu casa. Perdon. Nuestra casa. Al estar casados los bienes son compartidos y una vida en común, mucho amor, blablabla.
Yeonjun tardo en reaccionar unos segundos. Sus pequeños puños aferrados a la manta de la cama. Soobin no supo el por qué, pero aquel gesto le había hecho mucha gracias, como si canalizará su rabia en algo tan...inofensivo.
─ ¡No puedes quedarte en mi casa!
─ Yo creo que si.
─ Eso...eso es imposible.
ESTÁS LEYENDO
⊹ 𝟵 𝗮𝗻𝘁𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝘁𝗶 ★ ─ 🍂 ⌗ [Pausada]
Fanfic𝖽𝗈𝗇𝖽𝖾 𝗒𝖾𝗈𝗇𝗃𝗎𝗇 𝗎𝗇 𝗃𝗈𝗏𝖾𝗇 𝗈𝗆𝖾𝗀𝖺 𝗃𝗎𝗇𝗍𝗈 𝖺 𝗌𝗎 𝖺𝗆𝗂𝗀𝗈 𝖻𝖾𝗈𝗆𝗀𝗒𝗎 𝖾𝗇 𝗎𝗇 𝗏𝗂𝖺𝗃𝖾 𝖽𝖾𝗌𝖾𝗌𝗉𝖾𝗋𝖺𝖽𝗈 𝗉𝗈𝗋 𝖾𝗇𝖼𝗈𝗇𝗍𝗋𝖺𝗋 𝖺𝗅𝗀𝗎𝗂𝖾𝗇 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝖼𝖺𝗌𝖺𝗋𝗌𝖾 𝗒 𝗋𝖾𝖼𝗅𝖺𝗆𝖺𝗋 𝗌𝗎 𝗁𝖾𝗋𝖾𝗇𝖼𝗂𝖺...