Un frondoso bosque, clima helado y una vieja cabaña de madera oscura ha sido un escenario repetitivo para muchas personas a través del los años, pero siempre hay algo que marca de forma permanente a este tipo de lugares.
Heredar un lugar así es algo...
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Una escena se repitió, SooBin despertando en su cama después de que su cuerpo no supiera cómo reaccionar hacía lo sucedido, aunque pensándolo mejor fue la mejor reacción, según había leído algunas personas pierden la razón cuando se encuentran con algo paranormal, el rubio seguía cuerdo o eso siente.
Se mantuvo un rato sentado en su cama, repasaba lo sucedido mil y una veces y cuestionaba si en realidad pasó el doble. Todo llevó a la conclusión de que en verdad se había encontrado con YeonJun, un hombre que debió haber muerto hace muchos años pero que estuvo frente a él y hasta casi lo asesina.
"Todo esto parece un mal sueño" pensó antes de levantarse y bajar por algo de beber, su garganta estaba seca, se fijó en el reloj de la pared mientras se servía agua, había dormido toda la noche ya que eran las siete de la mañana.
Al terminar de tomar el líquido, se mantuvo ahí unos segundos sin pensar o hacer nada, solo existiendo, ahí se dió cuenta que el ambiente en la casa había cambiado. Ya no sentía el ahogo que lo había acompañado este último tiempo, se sentía ligero, como cuando llegó por primera vez al lugar antes de ver el cuadro de YeonJun.
Se dirigió al salón y la tranquilidad lo estaba inquietando un poco, cosa contraria a lo que esperaría. El plano silencio fue roto cuando su teléfono sonó con una notificación, un mensaje de su amiga preguntándole cómo estaba todo en casa. Sabía que desde la última vez ella podría haber quedado con un interés por el lugar, pensó en decirle lo sucedido pero ver como YeonJun reaccionó al enojarse le hizo pensarlo dos veces, aunque no sabe si estos sería algo que lo hiciera atacar, además cómo le explicaría todo eso a ella por mucho que sepa, él tiene inconclusos muchos de los detalles de todo esto como para poder pedir consejo.
Respondió el mensaje sin más detalles, miró a su alrededor buscando alguna pista que le haga saber si el pelinegro se encuentra en el lugar, incluso siente que este podría leerle la mente aunque no sabe si esto está entre las habilidades de lo que sea que es él.
Irene le responde y al casi asegurarse de que se encuentra solo, toma un suspiro profundo y decide preguntarle.
Oye, Irene, tú qué sabes de esto ¿En qué tipos de entidades se pueden convertir los muertos, sus almas?
Volvió a mirar alrededor asegurándose de su soledad mientras su amiga respondía.
Almas en pena, estás pueden ser tranquilas o agresivas que interactúan con los vivos, almas que repiten su vida como si estuvieran congeladas en el tiempo, esas son las más comunes.
SooBin sabía un poco de estos y la verdad es que ninguna de esas opciones le recordaban a YeonJun.
