SLOWBURN:: -Un día más, y todo esto terminará. -Expresó con serenidad, siendo aprensivo a la situación en la que estábamos.
Pero negué con la cabeza, volteando a mirarle otra vez.
-¿Sabes que me gustas tanto?
Este le tomo un momento reaccionar, lev...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Basta, ¡detente ahí! —Me frené en seco, a poco menos de 2 metros de chocar con la espalda de Bradley. Este puso sus manos sobre su cabeza por un segundo en frustración, antes de enfrentarme.
—¡No...! —Lo primero que busqué fue su mirada, por qué, los cielos saben que realmente creía que jamás le podría volver a mirar a los ojos. Brad parpadeó y en segundos retrocedió sin bajar el mentón.
—... No creas que esto significa que somos compañeros, ni mucho menos amigos.
—¿Qué? ¿Es solo un trabajo, por qué pensaría es-
—¡Shh! —Brad acercó su dedo índice cerca de mi boca, haciendo claro que no deseaba mantener ni una simple conversación conmigo, sin embargo, realmente no tenía opción, y su creciente desespero hacía ver que él entendía aquello.
Nos quedamos unos segundos en el vacío pasillo, y me limité a quedarme callado como me lo pidió, pues la realidad es que era lo mínimo que podía hacer. Bradley me había dado la espalda murmurando sobre como evitar esta situación, pero a medida que más lo pensaba, más caía en cuenta que tenía que trabajar conmigo.
Y finalmente, el mismo Cremanata III me dio la frente, —Mañana, 5 de la tarde, en mi dormitorio —Espetó, se dio la vuelta, y camino sin más rumbo a la salida, dejándome con las palabras en la boca.
—Ni antes ni después, 5 en punto —gritó una última vez antes de desaparecer de mi campo de visión.
Me quedé otros minutos en el pasillo, recapitulando todo lo que había sucedido para llegar hasta aquí. Salí lentamente de las aulas. Mientras más lo pensaba, menos podía evitar sonreír.
¿Puedo considerar esto como una cita?
Pff, claro que no, tampoco soy tan ingenuo. Pero definitivamente era algo.
Aunque aún tenía el claro detalle de que me detestaba y debía disculparme, se me acaba de dar la perfecta situación para hacerlo, ¿no?
Quiero decir ¿a cuántas personas les toca estar con la persona que les interesa en la misma clase, estar en riesgo de reprobar, y tener un profesor que les obligue a trabajar juntos justo después de haber tenido una riña?
