bebé › kookmin. (terminado)

32

Después de esa atrevida aventura, decidieron irse a dormir. A bueno, Jimin ya estaba más que dormido por lo cansado qué había quedado.

Jungkook lo acabaste.

El mayor lo limpió ya que así Jimin pudiera dormir más cómodo junto a él.

Se acurrucó junto a su bebé abrazándolo por su delgado cintura, para por fin quedarse dormido.

La mañana siguiente llegó pegando los rayos de sol en sus frentes, el celular de Jungkook sonaba así que solo alargó la mano para contestar.

—Bueno—Dijo con su voz ronca mientras acariciaba los cabellos de su bebé dormido, quién por cierto se veía sumamente hermoso con sus ojitos cerrados.

—Mierda Jungkook, ¿cómo qué, bueno? Te das cuenta de la hora—El mencionado volteó a ver el reloj que estaba en la pared y de verdad, mierda, eran las 10 am, ya no llegaría a la universidad y menos su pequeño a la preparatoria.—¿Dónde carajos estás?—Creo que se notaba el enojo de su hermano hasta por teléfono, porqué Yoongi sabía qué a su hermanito le valía un comino la escuela, y por él bien, pero que no mal acostumbrara a Jimin, quería que él menor saliera inteligente, no igual de tarado como su hermano.

—Ay lo siento Yoongi, me quedé dormido —Se escuchó una risa del lado contrario de la llamada.

—¿Haciendo que hermanito?—Jungkook suspiró. Qué pesado era su hermano, solo lo hacia para molestarlo porque obviamente sabía qué había pasado, ya que Jungkook no es de los que se suele quedar dormido, realmente le costaba dormir tanto tiempo.
Cuándo estaba dispuesto a contestar escucho la voz de Taehyung—¿Si le sirvió la falda a Jiminie?—De nuevo iba a hablar pero escuchó como Yoongi le pedía el teléfono—Con qué esas hermanito, ¿Te follaste al pequeño?—El mayor de todos no podía ser menos descarado, Jungkook ya estaba harto y aparte no sabría que decir así que mejor decidió colgar la llamada.

Sintió un cuerpo removerse en su pecho, así que optó por levantar las cobijas y pudo ver la cabeza de Jimin recargada en su pecho y sus dos ojos grandes observando su marcado abdomen.

—Buenos días bebé hermoso—Rápido el pequeño volteó a ver a la persona que le hablaba dándole una sonrisa de esas tan sinceras que solo Jimin sabía dar.

A Jungkook le dio tanta ternura que no pudo evitar abrazarlo con todas sus fuerzas apegando lo más que podía a su cuerpo a él pequeño.

—Kookie me.. estás .. aplastando—Pudo tratar de decir Jimin, e inmediatamente el contrario le hizo caso y dejó de apretarlo pero sin romper ese abrazo.

Así pasó un agradable tiempo hasta que Jimin decidió hablar—Kookie, se me antojó un helado ¿puedo comer helado?—El contrario asintió, porqué rara vez le negaba algo a su novio así que le dio un beso en la punta de su naricita y salió de la cama para recoger su playera de una silla y ponérsela a su bebé.

—Es para que no te enfermes, no quiero que andes desnudo—Dio otro beso en la frente y salió de la habitación por el helado que pidió su bebé. Él traía un pantalón de pijama ya qué se lo había puesto en la noche.

Abrió el congelador y sacó un bote de helado de chocolate con menta para después ir por unas dos cucharas, no sirvió una porción en un plato pues sabía que su bebé ama el helado con locura así qué sería malo de su parte solo ponerle una parte, mejor llevaba todo el bote completo y estaría seguro qué su Jimin se lo acabaría.

Subió las escaleras y abrió la puerta encontrándose a su bebé sentado en la cama con el control de la televisión en la mano.

—Kookie ¿Quieres ver una película conmigo?—Preguntó muy emocionado Jimin, Jungkook no respondió, solo se acercó y le dió el bote.

Jimin gustoso lo abrió y de inmediato enterró la cuchara en este para llevarse a la boca una gran cucharada pero su novio lo detuvo.

—Bebé, come de poco a poco, si no te dolerá la cabeza—Jimin hizo un puchero pero hizo lo qué Jungkook le pidió cuándo probó el helado. Lo disfrutó y volvió a tomar otra cucharada, pero esta para dirigirla a la boca del mayor quién sonrió y abrió su boca para comer lo que su bebé le daba.

—¿Te gusta Kookie?— Preguntó mientras seguía comiendo.

—Si, gracias bebé, ahora veamos la película que querías—Se sentó atrás de Jimin para qué este recargara su espalda en su pecho y que Jungkook pudiera rodear con sus fuertes brazos su cintura.

Se quedaron viendo la película importándoles poco la escuela. Luego tendrían que pasar la tarea pero ahora se disfrutaban el uno al otro.