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Jimin estaba algo nervioso, después de que su novio se hiciera el tatuaje volvieron a su casa para vestirse ya que su Jungkook le había dicho que irían a una cena con su familia.
                     
Y ¿Por qué se sentía nervioso? sencillo, cuando empezó a salir con Jungkook, esta le decía que era insuficiente, que solo era un juego, le decían que era feo y asqueroso, algo qué lo lastimaba psicológicamente. Por eso Jungkook decidió irse de la casa de su papás y comenzar a vivir con Jimin.
                     
Al final los padres de los hermanos Jeon pidieron disculpas, falsas pero bueno, digamos que quedaron en "buenos términos" pero aún así le aterraba la idea.
                     
Terminó de ponerse su pantalón junto con su gran suéter color rosa, de verdad se veía hermoso a los ojos de cualquiera.
                     
Con muchos nervios el menor se subió al auto del mayor, el cual comenzó a manejar hasta la mansión de sus padres.
                 
Al llegar, se bajaron siendo recibidos por el mayordomo, encontrándose que Taehyung y Yoongi habían llegado antes que ellos.
                     
Si bien a Tae no le habían criticado tan fuerte cómo Jimin, había cierta incomodidad, por el simple hecho de ser un chico ya que por lo menos los papás tenían la esperanza de que Yoongi no fuera gay, pero si lo fué, entonces no les quedó mas de otra que aceptar a Taehyung.
                     
La comida fue demasiado tranquila con una que otra pregunta de parte de los padres, cómo por ejemplo el qué tal iban en la escuela o cosas así, demasiado relajado para ser sus padres, pensaron los hermanos.
                     
No fue hasta qué cuándo estaban en la sala para "platicar" que Jungkook ayudó a acomodarse en el sofá a Jimin, que su playera de manga larga se alzó un poco dejando ver una de las mangas de tatuajes que su brazo poseía sacándolo un chillido a la madre.
                     
—¡Jeon Jungkook, qué son todos esos tatuajes, pareces criminal!—Tanto cómo Taehyung, Yoongi y el mencionado fruncieron el ceño, pues ellos tenían tatuajes y eso era una etiqueta bastante obsoleta para estar en pleno siglo XXI.
                     
Jimin no tenía tatuajes pero no entendía el porqué la gente juzgaba así a las personas cuando tenían tatuajes o piercings, porqué hasta eso, Jungkook se quitaba todas las perforaciones al ir a casa de su madre, no porque no quería que los vieran, si no porque no quería a su madre reclamando sus estupideces.
                     
El padre de los mayores decidió tratar de romper ese silencio tan tenso que había .—¿Cuándo se gradúan hijos?
                     
—En una semana padre —Contestó Yoongi.—pues qué era verdad, les tocaba entregar su tesis para poder graduarse, no irían a la fiesta que se hacía a los que obtenían su titulo, solo irían a recibir su diploma y ya.
                     
—No iremos a la fiesta por si se lo preguntan y no hace falta que vayan —Aclaró Jungkook para qué ni si quiera se les ocurriera a sus padres poner un pie en el auditorio.
                     
Solo quería tener su título para poder empezar a manejar la empresa, porque los menores solo iban a pasar a 6to semestre así qué ellos no se gradúan aun de la preparatoria.
                     
—Bueno hijos, cómo ya van a tener la empresa, su madre y yo nos iremos de viaje a Europa unos mese, espero que controlen bien los negocios—Les sonrió.
                     
—Aleluya, hasta que se largan —Contestó Yoongi, Taehyung le dió una mala mirada, ósea sí, sus padres fueron unos hijos de puta pero no era para que les contestara así de feo.
                     
Después del drama de la madre de los Jeon, se retiraron de lo que solía ser su antiguo hogar y cada pareja agarró camino para su hogar.
                     
Al ir en el carro, todo estaba muy silencioso y, Jungkook estaba extrañado, Jimin era alguien muy hablador y esta vez estaba tan tranquilo.

 —Jungkook yo si te quiero con todos tus dibujitos y aritos, así te me haces muy guapo, me alegra de que ya vayas a acabar tu carrera, estoy muy orgulloso de que vayas a poder dirigir una empresa, te amo.—La sonrisa sincera junto con las palabras del menor hicieran que un nudo se le formara en la garganta.
                     
Sus padres nunca le dedicaron esas palabras, por Dios, tenia un ángel a su lado, eso que salió de su boca fue lo más sincero que pudo haber escuchado en su puta vida.
                     
Sabía que Jimin no estaba con él por dinero o sexo como sus antiguas "parejas", Jimin estaba ahí con su amor sincero, mierda, tenía ganas de abrazar a ese pequeño ser y no soltarlo nunca más.

Maldición, ¿Por qué no le había pedido al chofer qué los trajera?, así el podría comerle la boca a su novio y no estar manejando.
                     
Al llegar a su casa, estacionó el coche y miró a su bebé con una sonrisa, las lágrimas lo traicionaron y escurrieron por sus mejillas.
                     
Jimin lo miró asustado, había dicho algo que puso triste a su novio o qué.
                     
Jungkook hizo su asiento para atrás y cargó a su bebé para ponerlo en su regazo, inmediato abrazó el cuerpo delante de él como si el mundo se estuviera acabando.
                     
—Gracias, gracias, gracias, te amo Jimin—Dijo con lágrimas, nadie le había dado ese amor tan hermoso.
                     
El menor lo abrazó por el cuello en lo que el mayor escondía su cara en su pecho y rodeaba la cintura pequeña.
                     
Se quedaron abrazados sintiendo ese amor tan sincero que tenían el uno al otro, eran su amor de toda la vida, lo supieron desde que se dieron un primer roce en sus manos.
                     
Su amor eran tan puro, fino, tenían sus roces, pero es parte de las relaciones, hablaban y se disculpaban, simplemente un amor verdadero.

bebé › kookmin. (terminado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora