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Nuevo día y la hermosa pareja caminaba hacia la preparatoria del menor, agarrados de la mano.

Al ya estar enfrente del edificio el mayor se agachó para poder ver la carita de su bebé y darle un besito en esa hermosa naricita que le encantaba besar

— Cuídate bonito, nos vemos en el recreo — volvió a posar sus labios en la frente del menor mientras este asentía a lo dicho por su novio.

Jungkook pudo ver como el pequeño corría hacia el edificio puesto que la campana que indicaba el inicio de clases ya había sonado .

Una jornada de clases aburridas terminó para Jimin el cual caminaba hacia los vestidores ya que Kook le había dicho al estar en universidad les obligan a escoger un deporte, así que el se decantó por natación.

Se desconcertó un poco al ver como una chica agitaba sus manos hacia el en forma de saludo, haciéndole señas al menor para que fuera donde ella se encontraba, así que Jimin lo hizo con cierta desconfianza.

—Tu eres Park Jimin ¿No? —Preguntó una chica de la cual se podía sentir un aura un tanto maliciosa.

 —Si ¿por qué? — el menor dudoso ladeó su cabeza sin comprender el porqué esa chica se le había acercado ya que el no era nada popular en esa escuela, era casi invisible, pero si por algo lo conocían no era por su nombre si no simplemente por "el novio de Jeon Jungkook"

 —Aléjate de Jungkook quieres, eres un tonto infantil — la chica sonrió al ver como los ojos del menor se llenaban de lágrimas, y Jimin siempre le lastimaba que lo llamaran infantil, el no era infantil, solo, un poco diferente a los demás, pero quizás tenían razón, al final el solo era un tonto infantil.

 —Ves, hasta vas a llorar que patético, pero no te preocupes yo te ayudo — la fémina saco una botella de su bolso y sin ningún remordimiento se la vació encima al pequeño cuerpo frente a ella. 

El menor se sintió tan avergonzado que sus piernas flaquearon cayendo de rodillas contra el suelo frío, subiendo sus manos para cubrir su cara y ojos de los cuales salían un sin fin de lágrimas.

Habían hecho llorara al bebé de Jungkook el cual salía de cambiarse de los vestidores, pero en su campo visual, divisó a una chica delante de su novio el cual estaba mojado, la fémina portaba una mirada junto con una sonrisa de malicia y una botella de agua vacía en sus manos.

El ver esa escena hizo que la ira lo invadiera, así que corrió para llegar enfrente de la chica y tomar su cuello apretándolo, cortando la respiración de la contraria.

—Maldita zorra te dije que lo dejarás en paz— dejó caer el cuerpo que sostenía, para que la chica saliera corriendo al mismo tiempo que tosía —Ustedes que ven malditos idiotas, arreglen sus asuntos — Jungkook les gritó a los estudiantes que se encontraban ahí observando la escena, y como ninguno de ellos quería una golpiza de uno de los hermanos Jeon, siguieron caminando. El mayor se acercó a su bebé, este tenía los ojos llorosos y la mayoría de su ropa se encontraba mojada, la mirada del menor se mantenía en el suelo hasta que Jungkook tomó su mentón y la levantó para que así sus ojos se encontraran.

—Tranquilo bebé, ya estoy aquí — dijo el mayor mientras acariciaba sus lindos bracitos y lo cargaba.

—Yo soy un infantil, soy un infantil — repetía y repetía el menor una y otra vez tanto en su mente como lo que salía por su boca, Jungkook sabía que venía después de eso, un ataque de ansiedad, necesitaba tranquilizarlo.

— No, no y no, tu no no eres un infantil, eres la cosita más hermosa de este mundo, y te digo algo, de verdad hasta mojado te vez adorable — las palabras las soltó con todo el amor que pudo transmitiendo cariño y seguridad para su bebé.

—¿De... de verdad, lo dices en serio? — y es que Jimin no se la creía, aunque sabia que Jungkook no lo engañaría, él estaba inseguro.

—Sabes que no te mentiría bebé —aseguró Jungkook.

—Yo quiero ir a casa — se acurrucó en el pecho de su novio el cual repartía caricias en los cabellos mojados del menor, claro que lo llevaría a casa casi nunca le negaba nada a su bebé y esta vez no sería la excepción.

Al llegar a los casilleros vio que Yoongi estaba ahí hablando con Taehyung hasta que la pareja volteó a ver.

—¿Qué le pasó?!— pregunto alarmado Yoongi pues el ver a Jimin mojado y llorando no era común.

—Una tipa le tiró agua, ¿Puedes cargarlo en lo que voy a decirle al director que nos vamos a retirar? —Yoongi asintió mientras tomaba a Jimin en brazos.

Si les preguntaban tanto Taehyung, como Yoongi se preocupaban demasiado por Jimin ya que ellos sabían de su "situación", cosas como cargarlo y darle besos en la frente y caricias era algo normal, pues no había dobles intenciones en ellos.

Así que ahí estaba Yoongi cargando a Jimin mientras Taehyung le contaba una historia para que se distrajera, logrando así que el llanto del menor se volviera casi nulo.

Al cabo de 10 minutos Jungkook ya estaba devuelta con las dos mochilas en su hombro, su hermano le dio al pequeño y se despidieron.

—Los iremos a visitar mañana, Chimin — agitaron su mano en señal de un adiós y se fueron a su hogar.

Al llegar, Jungkook lo bañó y dio de comer a su novio bonito intentando que se olvidará del feo suceso en la escuela, siendo así que ahora estaban acostados en su gran cama dándole mimos a Jimin.

—Bebé porque no dibujas o pintas algo— Le propuso eso Jungkook a Jimin para que se distraerá un rato en lo que el organizaba algunas cosas.

—Mmm está bien — así que de inmediato lo vio correr hacia su estudio.

Luego de 30 minutos, Jungkook se encontraba terminado unos ejercicios de arquitectura cuando la puerta del cuarto se abrió y ahí encontró a su bebé con una de sus sudaderas un pequeño short y sus calcetines largos con una hoja de papel entre sus manitas, una escena sumamente adorable.

—¿Qué tienes en tus manitas?— el mayor sabía que era un dibujo pero aún así preguntó.

—Un dibujo para Kookie — el menor dio una de esas sonrisas que tanto le gustan a su novio, haciendo que el corazón de Jungkook se detuviera por lo hermoso que se veía.

—En serio, gracias bebé — Le entregó el dibujo boca abajo y al darle la vuelta, Jungkook se llevó una gran sorpresa.

bebé › kookmin. (terminado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora