Yongbok se miró así mismo en el espejo, peinó su bonito cabello y arregló su corcet.
Estaba algo emocionado y nervioso, pero también estaba ansioso, quería conocer el rostro de su salvador.
Su corazón palpitaba como un maniático mientras mas se asomaba a su balcón, había hurtado un perfume de su madre. Olía a rosas, era un aroma cegador y delicioso.
Lee Ji Eun siempre solía decir que la forma de saber si un alfa y un omega eran predestinados, era por el aroma. Si gustaban de el aroma mutuamente, si la calidez que les ofrecía ese aroma los hacía sentirse tranquilos, sin duda crearían un lazo tan grande que ni la misma muerte podría separarlos.
Tal era el caso de sus padres, a pesar de que Ji Eun ya no estaba con él, YoungJae la tenía muy presente en su vida.
Yongbok anhelaba un amor tan puro como el de sus padres, a pesar de ser un omega criado en la guerra y rodeado de alfas, aún tenia su lado amoroso.
Cerró los ojos con fuerza y salió de su habitación, su hermano ya estaba justo a mitad de la escalera. Minho lo miró con una sonrisa burlona antes de tenderle la mano para que ambos bajaran.
– Para casi morir en un pueblo fantasma, te ves bastante bien – Yongbok lo miró con ceño fruncido – En ocasiones te pareces a mamá
– Gracias – Sonrió nuevamente.
– Pero ahora eres mas como un feo ogro – Yongbok golpeó su hombro sin compasión, Minho lo soltó antes de llegar al descanso de la escalera.
Yongbok se quedo ahí parado.
Se sentía bastante nervioso y temía que su aroma natural se viera afectado por sus emociones negativas. Tenía que dar una buena impresión.
Bajó las escaleras con seguridad y se encamino hacia el salón.
Abrió las puertas rápidamente y se quedo en el marco, sus preciosos ojos recorrieron la enorme sala, pero se detuvieron justo cuando se encontraron de frente a un alfa alto, de cabello negro y bastante bien parecido.
Hyunjin apretó la copa de vino que previamente YoungJae le había ofrecido, sus ojos se abrieron a más no poder, sintió una presión sobre sus hombros al tener a esos bellos y enormes ojos mirándolo.
Su mente estaba en blanco.
Pero a ciencia cierta no entendía el porqué, el omega que creía muerto estaba vivo y era un príncipe, eso podría ser, o igualmente porque el omega que creía muerto era físicamente hermoso.
Su cabello rizado, rostro angelical y esos bellos destellos que tenía por ojos.
Yongbok se acercó a él con pasos torpes, Hyunjin retrocedió discretamente.
– Lee Yongbok – Se presentó enseguida, con la respiración agitada y las mejillas color rojo.
– Hwang Hyunjin – Igualmente se presentó, de manera más fría y áspera.
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NARCISO » ᴴʸᵘⁿˡⁱˣ
Romanceꔫ: ❝El despiadado rey Hwang Hyunjin tuvo un gran acto de bondad, uno realmente difícil de adjudicar a un tipo como él. Nadie jamás en el reino de Gorse se hubiera imaginado que el rey ayudaría a un omega malherido que encontró en el bosque, sin emb...