ᴋɪɴɢ ᴏꜰ ᴍʏ ʜᴇᴀʀᴛ | ᴊᴜɢʜᴇᴀᴅ ᴊᴏɴᴇꜱ

Capítulo 4🐍

Bella:

De algún modo el manual de Grifos y Gárgolas logró salir a la luz nuevamente, hay miles de copias dando vuelta por Riverdale lo cual tiene a los padres bastante preocupados. Hermione Lodge está en nuestra sala de clase para hablar de aquello.

Trazo lineas abstractas en la hoja sobre mi mesa ya que estoy aburrida de estas advertencias. Jughead está sentado en la primera fila y yo justo detrás, no me gusta estar en los primero puestos pero a él si.

—Dos estudiantes se quitaron la vida, otra lo intentó —recuerda la alcaldesa Lodge—. Lo que une las tragedias: las tres víctimas jugaban algo conocido como Grifos y Gárgolas.

—Espere —interviene mi novio—. ¿Entonces admite que el juego mató a Dilton y Ben?

—Si, Sr. Jones.

—Pero, ¿de dónde salió ese juego? —cuestiono confundida—. ¿Dónde lo consiguieron ellos? ¿Y de dónde diablos salieron esas copias?

Reggie, quien está a mi lado, arruga un pequeño pedazo de papel para lanzarlo en mi dirección, este rebota en mi nariz logrando que él ahogue una risa mientras yo lo miro con falsa indignación. Debo admitir que ha estado muy pendiente de mi desde que Archie no está con nosotros.

—No tenemos muchas respuestas, pero por lo poco que sabemos el juego parece hecho para mentes impresionables —responde Hermione con calma—. Adolescentes como ustedes.

—Uhm... —murmura Reggie divertido—. Desafío aceptado.

Todos nos reímos disimuladamente, arrugo otro papel para lanzárselo de forma distraída. Esto logra que comencemos una pequeña guerra con bolitas de papel para matar el aburrimiento que nos provoca esta charla.

—Respeto a los muertos, pero algunos aquí son pastores no ovejas —habla Cheryl.

—Las misiones y los escenarios de rol del juego están diseñados específicamente para fomentar el delirio, la paranoia y la violencia —hace una pausa—. Como alcaldesa, prohibiré Grifos y Gárgolas.

Todos nos miramos claramente confundidos, siempre que alguien prohíbe algo las cosas terminan mal, ya que por algún motivo lo prohibido suele llamar la atención.

—La Sra. Burble trabajará horas extra y establecí una línea de apoyo las 24 horas el día con Kevin Keller.

—Estaré ahí después de clases —afirma Kevin.

—Como madre, se los ruego, cuídense... y aléjense de ese juego.

Evito rodar los ojos ante la seriedad en el tono de voz de la alcaldesa, si es tan peligroso como alegan deberían empezar por decir toda la verdad, le tienen miedo al juego por una razón que no nos quieren decir.

En ese momento suena el timbre y todos nos disponemos a salir, beso la frente de Jughead con dulzura antes de seguir a Veronica por el pasillo, en la escuela trato de estar con ella como le prometí a Archie.

Vamos por unos vasos de café para luego dirigirnos a la oficina del periódico escolar, podemos estar aquí ya que el directo reconsideró mi expulsión del periódico.

—Noticia de última hora, mamá, prohibir algo solamente lo vuelve más interesante —bufa Veronica molesta—. Y ahora solo se habla de ese estúpido juego.

—Es como una plaga —frunzo el ceño—. No estás jugándolo, ¿verdad?

—Me conoces, B —suelta una risa—. No sales en revistas sobre jóvenes emprendedores jugando y bailando en el bosque.

—Tienes un punto.

—¿Jughead y tú están jugando? —me pregunta.

—No, ni siquiera quiero acercarme a eso, para cosas diabólicas me voy con la ouija —niego con la cabeza—. Seguimos tratando de averiguar porque mi mamá y su papá se enfurecieron porque teníamos los manuales.