NUEVE.

188 32 22
                                    

—Mira nada más quien decidió volver. Estoy genuinamente sorprendido—dijo una masculina voz detrás de Jisoo y no hizo falta voltear, pues la figura de Moon podía verse a través del espejo.

Jisoo sonrió ligeramente. No estaba seguro de poder o querer hacer amigos en ese lugar, pero ese chico parecía tener buenas intenciones, y en ese ambiente tan hostil, lo agradecía sinceramente.

—Yo... necesito el trabajo—expresó con timidez.

—Lo sé, pequeño. Todos llegamos aquí por esa razón. ¿Pero qué fue lo que sucedió para que tuvieras que irte así de repente? ¿Acaso Jihwan te dijo algo de nuevo?

Jisoo asintió—él volvió a recordarme lo mucho que me odia, pero no fue por eso que me fui anoche. Es que...

—¿Qué sucedió?

—Bueno... tuve a mi primer cliente. Joe me dijo que era alguien importante y eso me puso muy nervioso. El tipo quería que bailara para él pero no pude hacerlo. Y luego... él intentó besarme y me quedé pasmado—explicó completamente desanimado. Si bien era cierto que él mismo había decidido cambiar su actitud, el recordar ese momento le hacía sentirse apenado.

—Comprendo. Aquí la mayoría de los clientes son unos bastardos que les gusta maltratar a los nuevos para sus oscuras fantasías, además muchos de ellos son físicamente espantosos. A todos nos pasa en nuestra primera vez. ¿Y quién era ese cliente? Tal vez yo pueda hablar con él para que no se ponga en tu contra. Muchos son rencorosos también.

—En realidad... no sé si haga falta ya que esta tarde Joe me dijo que de hecho dejó una buena propina, así que por eso decidí quedarme y averiguar si hay manera de solucionar las cosas con él si es que vuelve. Y de hecho... el tipo no tenía mal aspecto, de hecho es muy atractivo. Estoy asustado de este trabajo y no quisiera meterme a la cama con nadie, pero... no me hubiera molestado besarlo—confesó sintiendo su rostro arder.

Ante aquellas palabras, una sonrisa apareció en el rostro del contrario.
—¿Y entonces por qué no lo besaste?

—Bueno, es que yo... en realidad... nunca he besado a nadie, así que no sé cómo hacerlo—confesó una vez más esta vez agachando la mirada debido a la vergüenza. Estaba seguro de que esta vez su rostro estaba tan rojo como el ardor que sentía por dentro.

Esta vez, Moon dejó escapar una pequeña carcajada que hizo que el ardor en las mejillas del contrario se sintiera con mayor intensidad.

—Cariño, eres demasiado tierno. Si ese es el mayor de tus problemas, entonces yo puedo ayudarte—expresó completamente confiado, y sin dejar que Jisoo preguntara a qué se refería, se acercó aún más él para tomarlo de las caderas y unió sus labios con los suyos.

Los ojos del chico se abrieron con sorpresa y nuevamente se quedó congelado en su sitio. Ahora menos que nunca sabía cómo proceder, pero Moon se encargó de tranquilizarlo al separarse de él solo por un momento.

—Confía en mí. Si ese cliente vuelve o consigues a otro y lo besas, seguro tendrás en tus manos a cualquiera. Eres demasiado caliente como para desaprovecharte. Besar a tus clientes es un plus si bailas para ellos y no planeas dejar que te lleven a su cama.
Ahora mueve tus labios como yo lo hago y déjame a mí hacer lo demás—explicó y nuevamente sus labios se unieron en un beso atrevido.
Jisoo no sabía qué hacer, pero decidió hacerle caso a su compañero, pues muy probablemente tenía razón debido a su experiencia, así que se dejó llevar y se abrazó al cuello del contrario para corresponder tratando de llevarle el ritmo.

—Esto me da asco—dijo una voz más, cosa que hizo que sus acciones se detuvieran.

Moon sonrió sin inmutarse, muy diferente a Jisoo quien se separó casi asustado.

DOUBLE LIFE 🖤 YoonHongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora