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—Nos iremos de aquí —Kim Jungjae dijo mientras se apresuraba a entrar en la casa vacía a la que habían evitado volver desde la mañana anterior.

—No, espera —Taehyung dijo mientras lo seguía de camino a su antigua habitación, suspirando cuando su tío lo ignoró y avanzó con pasos apresurados porque no quería perder más tiempo y arriesgarse a que alguien los descubriera—. Quiero quedarme unos días más. No fue para tanto.

—Pudieron haberte herido si te hubieran atrapado —Jungjae se paró en seco para encarar a su sobrino que lo miró con una mueca en los labios—. Tengo todo lo que buscaba y mis responsabilidades en este lugar no son más importantes que tu seguridad.

—Pero no me pasó nada —se apresuró a decir cuando vio a su tío tomar su equipaje con el ceño fruncido. Taehyung se paró junto a él y gentilmente tomó las maletas de sus manos para regresarlas a su lugar junto a su cama—. Tío Jae, espera, solo necesito unos días más. Me encontré con unos viejos amigos y me gustaría hablar un poco más con ellos. Siempre me has dicho que debería salir más con personas de mi edad y en serio la pasé muy bien.

—Sí, pero estar aquí es peligroso —Jungjae dijo con un tono severo y los brazos cruzados contra su pecho cuando se sentó en la cama, siendo seguido por su sobrino que se veía abatido.

—Tendré más cuidado cuando lleguen mis padres. Si es necesario, ni siquiera les hablaré. Por favor, deja que me quede un poco más, te lo suplico —Taehyung mordió con fuerza su labio cuando notó que su tío se detuvo a pensarlo en lugar de negarse al instante como siempre—. En serio hay muchas cosas que quiero hacer aquí antes de irme. Han pasado tantos años, hay lugares nuevos que quiero conocer y...

—Bien —Jungjae dijo tras un suspiro—, pero si nos quedamos, no será en esta casa. Toma tus cosas y prepárate para caminar un rato.

Taehyung asintió confundido, pero no protestó.

Tomó algunas de sus antiguas pertenencias que sabía que sus padres y hermano no extrañarían, y siguió a su tío que salió de la casa y caminó en dirección al bosque después de tomar todo su equipaje. La emoción de regresar a ese lugar lo invadió y creyó que no podía ser más afortunado cuando después de un largo rato caminando llegaron a una pequeña cabaña que no contaba con más de un par de muebles.

—¿Qué es esto? —preguntó asombrado a su tío mientras dejaba sus cosas sobre un viejo colchón que rechinó por el peso.

—Un regalo de los padres de Sooyoung —Jungjae dijo al encogerse de hombros, pero con eso fue suficiente. Taehyung no preguntó más porque sabía que la familia de su tía era adinerada y no era un secreto que le daban ese tipo de obsequios—. Antes, tus primos y yo pasábamos días aquí para divertirnos juntos, pero está demasiado lejos del pueblo, por eso no lo mencioné antes. No es mucho, pero está bien para un par de días.

Para Taehyung no podía ser más perfecto.

—¿Todo lo de la cocina sirve? —preguntó con una idea en mente cuando vio el horno y un viejo refrigerador.

—Si te refieres a la comida, no —Jungjae dijo con una mueca de asco porque estaba seguro de que debía de haber algo dentro—. Tenemos que limpiar y hacer las compras.

Tenía razón, Taehyung tenía algunas cosas que comprar.

Tenía razón, Taehyung tenía algunas cosas que comprar

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The Forest | TKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora